1907
13 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.La Voz de Galicia se hacía eco de una macabra situación. Y es que los terrenos del antiguo cementerio conservaron tumbas sin exhumar y un grupo de varios chiquillos se entretuvieron en esas parcelas jugando al fútbol callejero. Una calavera humana servía de balón a los jóvenes. El espectáculo produjo un hondo disgusto.
La prensa y la opinión pública piden que se haga una inspección a los terrenos del cementerio antiguo, convertidos en aquel momento en solares abiertos para que se recojan de allí los restos mortales humanos que yacían en un punible abandono, expuestos a la voluntad de los perros que de noche vagaban por allí y a las profanaciones de los huesos por parte de desaprensivos.