El eje Sanxenxo y O Grove, la costa más afectada por la llegada de aves muertas

Marcos Gago Otero
marcos gago SANXENXO / LA VOZ

PONTEVEDRA

MARCOS GAGO

La Xunta analiza la composición del vertido; Salvamento no halla manchas en el mar

07 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los frailecillos muertos y cubiertos con una sustancia oleosa siguen llegando a las playas de las Rías Baixas. Los primeros ejemplares aparecieron en los arenales el viernes 28 y el goteo no cesa. Solo ayer en el entorno costero que va de Foxos (Sanxenxo) a Pedras Negras (O Grove), el Bottlenose Dolphin Research Institute (BDRI) ha contabilizado 32 ejemplares sin vida en la arena.

La lista es más amplia. Esta semana se han detectado casos en buena parte del litoral, desde Mougás, en Oia, y la ría de Vigo -caso de Samil y Monteferro-, por el sur, hasta O Barbanza y la Costa da Morte, al norte. La mayoría son frailecillos, pero también hay araos, alcas y alcatraces. El balance de las organizaciones ecologistas y ambientales como el BDRI, Cemma y Seo /Birdlife -que mencionan más de 150 aves marinas muertas en estos días en las playas gallegas- difiere sustancialmente del aportado por la Xunta -Medio Ambiente destaca que solo le constan 15 aves pelágicas afectadas pero vivas, y otras 28 muertas-.

Con los datos que maneja BDRI, su portavoz Bruno Díaz, entiende que el eje que va de Sanxenxo a la península de O Grove es el tramo de litoral que está recibiendo una mayor arribada de ejemplares muertos empujados por las olas en todas las Rías Baixas. Añade también que, dado que los frailecillos son aves marinas y ante la extensa distribución de ejemplares muertos por varias rías, todo parece indicar que el vertido se produjo en alta mar frente a Galicia. «Este es un tema serio por un impacto importante, y me temo que el frailecillo sea solo la punta del iceberg, que porque no hay duda de que ha habido un vertido de una sustancia que se ha disuelto en el mar».

Desde la Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños (CEMMA) confirman la aparición de aves muertas y manchadas por esta sustancia desconocida desde Oia y Nigrán hasta una zona tan al norte como Malpica.

«Sustancia oleosa»

La Consellería de Medio Ambiente precisó que se trata de una «sustancia oleosa e pegañenta de color amarela». En principio, el departamento autonómico piensa que no se trata de petróleo y se remite a los resultados de un análisis científico sobre su composición. El análisis de las muestras todavía ocupará varios días en ofrecer una conclusión.

Por su parte, las pesquisas tanto de la Consellería do Mar y Salvamento Marítimo para determinar el origen de este vertido han sido infructuosas y el carácter migratorio de las aves afectadas lo complica también un poco más. Mar explicó que se han hecho «inspeccións aéreas e por satélite» tanto por los Gardacostas de Galicia, como por Salvamento Marítimo y la Agencia Europea de Seguridad Marítima. Los trabajos se centraron en las zonas donde aparecieron muertas las aves y no se detectó «ningún tipo de contaminación no mar» ni se recibió «ningún aviso por parte do sector pesqueiro de que se atoparan manchas no litoral galego».

Técnicos del Instituto Tecnolóxico para o Control do MEdio Mariño (Intecmar) hicieron simulaciones «tendo en conta a zona na que apareceron as aves e as condicións das correntes, ventos e ondada dos días previos» para ver si eran capaces de determinar el posible foco contaminante. «Nas inspeccións realizadas nesas zonas non se atopou ningún rastro de contaminación», sostiene Mar.

Salvamento Marítimo añadió que se lleva a cabo una «labor constante de vigilancia» del mar con un avión y satélites europeos, pero este organismo apuntó que «no ha detectado indicios de contaminación en la zona económica exclusiva del noroeste de la península Ibérica. Así pues, por ahora, no se sabe qué pasó, salvo la evidencia del vertido en las aves afectadas por la sustancia.