«Es importante la prevención ligada a la actividad física y a los cribados»

Carmen Abeledo Márquez (Pontevedra, 1954) preside desde hace un mes la junta provincial de Pontevedra de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). Esta enfermera jubilada, autora intelectual del Pasominuto -un mapa con una veintena de rutas urbanas y fluviales por la ciudad que detalla la distancia, los pasos y el tiempo-, afronta ilusionada esta nueva etapa. Potenciar los hábitos saludables es su reto.

-¿Cómo está siendo su aterrizaje al frente de la asociación?

-Como llevaba un año como voluntaria ya conocía lo que es la asociación. Lo que es la presidencia lo estoy empezando a conocer desde hace un mes. Realmente hay trabajo. No deja de ser una oenegé, pero tienes que dedicarle tiempo, si no no te puedes comprometer en una cosa de este tipo. Me gusta y ya lo dije, engancha. Yo soy una persona muy activa y al jubilarme creo que he buscado el sitio adecuado para seguir activa.

-¿Cómo hay que entender la jubilación?

-Hay que ser una persona activa toda la vida. Creí que lo iba a añorar más, pero a raíz de que en cuanto me jubilé ya estaba como voluntaria eso me ayudó a dar ese paso tan importante. Sé que hay compañeras que lo pasan mal, que no se acostumbran. Mentiría si dijera que no echo de menos el trabajo que hacía antes, pero es importante saber vivir todas las edades de la vida si se tiene suerte de llegar con un poco de salud. Yo lo vi con mis padres. Ser una persona de 65 años significa tener experiencia de la vida y poder aportar muchas cosas a los que vienen detrás.

-La AECC apuesta por un perfil más técnico para la presidencia. Usted como enfermera lo cumple.

-Yo a quien le tengo que agradecer es a Marisé [Crespo, expresidenta] el que pensara en mí. Cuando estaba trabajando ya me decía que yo la iba a suceder. Cuando te proponen como presidenta tienes que ir a Madrid aunque tengas el apoyo de Pontevedra, se necesita el visto bueno de Madrid. Es verdad que buscan perfiles de gente de la rama sanitaria. Yo trabajé casi 44 años en la sanidad. Me aceptaron y estoy muy contenta.

-¿Fue vocacional en su caso la enfermería?

-Sí. Mi padre era enfermero y es una cosa que o te gusta o no te puedes dedicar a ello. Lo vi desde niña y le decía a mi padre que yo quería ser enfermera. Él me decía que no todo el mundo valía para esa profesión, y le contestaba que yo iba a valer. Hice mis primeras prácticas en el Hospital Provincial con mi padre y él me dijo que, si realmente yo me veía válida, que adelante.

-Su reto es potenciar los hábitos saludables, trabajar más si cabe en prevención desde la AECC.

-En lo que más volcada está la asociación es en los pacientes y en los familiares, pero ahora también se están empezando a hacer cosas de prevención vinculadas a la actividad física. Tener en las propias sedes alguna actividad o algún profesional para hacer prevención de la obesidad, del consumo de tabaco, nosotros ya tenemos talleres... Es importante también la labor de difusión de los cribados, como el de colon. Es una prueba muy sencilla y sobre todo los hombres son los que menos se la hacen y los que más padecen este tipo de cáncer. Esto salva vidas.

-¿Cuándo empezarán esas propuestas de actividad física?

-Antes del verano queremos ya hacer algún taller. Tenemos uno de relajación programado y uno de actividad física ya en marcha los miércoles. Son para pacientes y familiares, aunque se quiere abrir a cualquier tipo de persona sana que no esté enferma para hacer esa prevención. Aquí se atiende a todo el mundo aunque no sea socio.

-¿Desde fuera se sigue pensando que la AECC son mujeres con tiempo libre que piden fondos en las calles?

-La asociación empezó en el 53 y quienes se juntaron fueron ya pacientes con cáncer. Empezó así, igual que se unían pacientes diabéticos. Lo que está claro es que aún sigue siendo la gran desconocida. Mucha gente, yo misma como personal sanitario, no sabía que se hacían talleres para dejar de fumar.

-¿Todos los servicios que se ofrecen son gratuitos?

-Todo lo que se hace es gratuito para pacientes y familiares. Ahora queremos abrir para más gente siempre que haya sitio, pero la prioridad es para pacientes y familiares.

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