Muere al naufragar mientras faenaba, pero no se califica de accidente laboral

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

La mujer del patrón del Senefand 1 reclama su indemnización ante los tribunales

05 dic 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Vicente Pazos era el patrón del Senefand 1, un barco de una empresa 100 % de capital gallego, pero que estaba faenando en Senegal cuando se hundió hace 3 años. Como el barco no tenía pabellón español, el suceso fue en aguas africanas y él no figuraba en la Seguridad Social en ese momento, la Administración española no le ha reconocida a su viuda la circunstancia de que su marido murió en un accidente laboral. Y eso que en el informe técnico de la comisión que investigó el caso, como explica su abogado, Alipio Santiago, la muerte se produjo cuando el buque estaba faenando y subiendo el aparejo a bordo. Esta es una de las circunstancias de un trágico suceso de hace tres años y en el que perdieron la vida Vicente Pazos, marinense afincado en Barro, y dos tripulantes senegaleses. Ninguno de sus cuerpos apareció nunca.

La viuda del capitán, Sandra Patricia Arias, compareció este miércoles ante la prensa, arropada por su letrado y por el portavoz de la CIG, Xabier Aboi. Arias quiso explicar la situación en la que se encuentra su familia ante el juicio que se celebrará el lunes en Vigo y en el que reclama una indemnización de 400.000 euros para garantizar el futuro suyo y de sus hijas pequeñas, ahora de 9 y 13 años. Es una cifra muy superior a la cuantía ofrecida por la empresa, adscrita al grupo gallego Profand y que según el abogado de la viuda solo llegó a ofrecer entre 50.000 y 100.000 euros, una cifra demasiado pequeña para una familia que perdió a su «pilar fundamental», como lo definió la mujer.

Para Sandra lo que le está ocurriendo es un duelo interminable que está teniendo serias repercusiones en su familia -desveló que su hija mayor está a tratamiento psicológico-. Ella misma tampoco comprende la actitud de la empresa, que de prestar toda la colaboración en los primeros días de la tragedia, pasó a intentar pagar lo mínimo por lo ocurrido, lo mismo que el seguro.

Ahora decidirá el juez

Por esto mismo, la viuda argumentó que no le dejaron otra opción más que demandar y reclamar que sea un juez quien fije la compensación económica. Eso sí, este prolongado tira y afloja entre las partes está teniendo un coste muy elevado en su estado de ánimo. Con entereza, pero nerviosa, la viuda de Vicente Pazos afirmó: «Me parece vergonzoso que después de una experiencia tan traumática nos hagan pasar por los juzgados. Hacerme recordar todo es denigrante».

El letrado y el representante de la CIG no quisieron desvelar toda la línea argumental de su acusación, pero el abogado apuntó a las características estructurales del barco, que supuestamente lo harían arriesgado para el caladero de Senegal: «Está claro que se un barco que coa mar en calma se afunde en tres ou catro minutos é porque algo hai aí». Sandra también se explicó en el mismo sentido: «Quiero saber con contundencia si este barco cumplía con las condiciones de seguridad para ese caladero».