El Museo Massó, en Bueu, custodia la colección ballenera más importante de España, como testimonio de la última industria que se especializó en la caza de cetáceos.
-¿Cuál fue la importancia de la industria ballenera en la comarca?
-Las últimas balleneras de España fueron las de Galicia, las de Ibsa en Caneliñas, en Cee; Massó en Cangas y Cabo Morás. Galicia era una potencia ballenera. Cuando la Comisión Internacional Ballenera empezó a controlar su caza, porque era intensiva y se estaban extinguiendo, se cerró la de Cabo Morás y se fusionaron Massó e Ibsa
-¿Dónde las cazaban?
-Aquí, a unas millas de la costa.
-¿Cuándo fue su mejor época?
-Parte de los sesenta y sobre todo la década de los setenta, porque llegaron los japoneses y compraban toda la producción, pero en carne. Massó tenía tres buques. Aquí la pesca de ballena empezó en la Edad Media, con la llegada de los vascos, en los siglos XII o XIII, desapareció en el XVIII. Hubo que esperar al siglo XX para que en Galicia volviese a tener importancia, pero ya con factorías en tierra. Hablamos de los años cincuenta y duraron hasta principios de los ochenta.