Pontevedra registra la tasa más baja de siniestros al volante con drogas

Cada cierto tiempo aparecen noticias en las que se recoge que Pontevedra figura entre las provincias donde más accidentes se producen, donde más sanciones de tráfico se tramitan o donde los seguros de los coches son más caros. Son distintos los factores que influyen en estas cuestiones, si bien en el caso concreto de la siniestralidad al volante, desde el subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Pontevedra inciden en que «el consumo de alcohol, otras drogas y psicofármacos sigue influyendo negativamente en la seguridad vial», al tiempo que aluden a que, «según el informe del Instituto de Toxicología y Ciencias Forenses, durante el pasado año más del 40 % de los conductores fallecidos iba borracho o drogado».

De igual modo, y al tiempo que mantienen el refuerzo de los controles preventivos en los principales accesos a Pontevedra con motivo de la celebración de las fiestas de A Peregrina, aluden a otros estudios que se han realizado en el ámbito de toda Galicia para establecer las circunstancias de los siniestros más graves en carreteras. De este modo, una de las conclusiones que se extrae de estos análisis es que Pontevedra «presenta la tasa más baja en la accidentalidad bajo la influencia de sustancias psicoactivas, con un 24 %».

Esta circunstancia, si bien podría tener una lectura positiva, lo cierto es que no la tiene en el ámbito del subsector de Tráfico: «Mientras siga habiendo accidentes con muertos por la influencia del alcohol o las drogas no podemos estar contentos, ni calificar los datos de positivos», sostenía a principios de esta misma semana el teniente Juan José López Castro. En todo caso, mantuvo que «creemos que el efecto disuasorio de los controles de alcohol o drogas influye en mantener esta tasa de influencia menos mala».

En todo caso, el instituto armado mantiene su apuesta por intensificar los operativos preventivos, principalmente, con ocasión de fiestas, conciertos o celebraciones que impliquen una gran afluencia de personas y que, por tanto, conlleven un incremento de los desplazamientos. Es el caso, ya no solo de las fiestas de A Peregrina, sino de la reciente Festa da Auga de Vilagarcía o de los festivales musicales que se han venido organizando en distintas localidades de la provincia de Pontevedra.

Efecto disuasorio

De igual modo, desde el instituto armado insisten en que los controles buscan, por un lado, un efecto disuasorio, que la persona que haya consumido bebidas alcohólicas o drogas opte por no ponerse al volante de un vehículo consciente de las sanciones que esa conducta le puede acarrear y, por otro, sacar de la red viaria a aquellos conductores que hacen caso omiso a las normas de forma reiterada. A este respecto, cada vez es más común que la Audiencia de Pontevedra avale sentencias contra multirreincidentes que, en la práctica, implican su ingreso en prisión, aunque sea por períodos cortos de tiempo.

En la mayoría de las ocasiones, se trata de individuos frente a los que se ha comprobado que condenas económicas o de trabajos en beneficio de la comunidad no han tenido un efecto disuasorio. Es por ello que, según confirmaron fuentes judiciales, cada vez son más las resoluciones de los magistrados provinciales ratificando la decisión de los jueces de lo Penal de, en estos casos, no suspender las penas de prisión y, consecuentemente, el condenado ingresa en la cárcel.

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