Vecinos de O Vao rodean a la víctima de un robo para proteger la huida de los atracadores

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

GUARDIA CIVIL

Uno de los sospechosos, pese a que acababa de cumplir condena por otros robos, quedó en libertad con cargos. La Guardia Civil busca a su cómplice, que ya está plenamente identificado

31 jul 2019 . Actualizado a las 20:31 h.

Poco le duró la libertad a un vecino de Poio que acababa de cumplir condena por varios robos violentos. Y es que, a los escasos días de pisar la calle, ya consumó el primero de los tres atracos con los que le vincula la Guardia Civil y que han determinado su nuevo arresto. Todos estos asaltos se han producido en los últimos dos meses y tienen en común el hecho de que se produjeron en las inmediaciones del asentamiento marginal de O Vao de Abaixo. 

El primero de estos tres violentos robos tuvo lugar a mediados del pasado junio cuando un repartidor de paquetería fue abordado por dos individuos que le arrebataron violentamente el paquete que tenía que entregar a un vecino del mismo barrio. Desde la Guardia Civil lamentaron el hecho de que los dos asaltantes fueran ayudados por el resto de los vecinos de O Vao, los cuales «rodearon al repartidor para proteger y garantizar la fuga de los autores».

Apenas un mes más tarde, el 16 de julio, y a la misma hora, las cinco de la tarde, la historia se repetiría con un segundo repartidor. Mientras esperaba al destinatario de un paquete que tenía que entregar y al que había llamado por teléfono, fue abordado por dos personas que, esgrimiendo un objeto punzante que le colocaron a la altura del cuello, le sustrajeron el paquete y se dieron a la fuga.

El tercero de los robos ocurrió a primera hora de la noche del 24 de julio. En esta ocasión, la víctima atravesaba el poblado cuando fue asaltada por dos individuos. Tras un breve forcejeo, el denunciante acabó por los suelos, momento en el que los ladrones le arrebataron la cartera en la que guardaba treinta euros.

Las descripciones aportadas por las tres víctimas fueron fundamentales para identificar a los supuestos asaltantes, uno de los cuales fue localizado y detenido. Se trata de un joven de 30 años, vecino de este asentamiento. Esta persona, en todo caso, no fue trasladado a prisión, toda vez que el juzgado de guardia de Pontevedra decretó su libertad provisional con cargos.

La Guardia Civil mantiene abierta esta investigación para localizar y detener al segundo sospechoso que ya está plenamente identificado.