El futuro gobierno se cocina a fuego lento

Serxio Barral Álvarez
Serxio Barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Capotillo

Los nacionalistas escucharán a sus militantes antes de decidir si llaman al PSOE

04 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La noticia sobre los pactos postelectorales en Pontevedra es que no hay noticia. Pese a los reiterados llamamientos públicos del PSOE (4 concejales) a negociar con el BNG (11), los nacionalistas siguen haciendo oídos sordos. Y así seguir, al menos, hasta el próximo jueves, ya que el BNG ha convocado a sus militantes a una asamblea mañana, miércoles, «para falar de pactos ou non pactos». Serán los afiliados, indicó ayer Raimundo González Carballo, quienes aprueben la estrategia a seguir. Por lo tanto, hasta el jueves como mínimo no habrá movimientos por la parte nacionalista. «Non temos ningún tipo de apriorismo», subrayó el responsable local del BNG, que insistió en que los nacionalistas están «abertos a todas as posibilidades».

Con la investidura de Miguel Anxo Fernández Lores garantizada -pues la del BNG es la lista más votada y el PSOE ya anunció que su única premisa e que no apoyará a un alcalde del PP-, los nacionalistas no tienen prisa por cerrar un acuerdo endeble o que pueda dejar flecos. Ambas partes -BNG y PSOE- se conocen bien y el último de los pactos de gobierno (2011-2015) acabó con mucha tensión, un escenario que no se quiere repetir ahora.

«Nós queremos planificar o mandato para os próximos catro anos -insistió ayer González Carballo- e non existe unha data límite para negociar». De esa asamblea de militantes y de esa planificación en la que ya está trabajando el nuevo grupo municipal saldrán, llegado el caso, «o plantexamento de mínimos» para la hipotética negociación con los socialistas. «É o que fixemos sempre», subrayó el concejal nacionalista, que junto con Lores y César Mosquera, participó en todas las negociaciones que dieron como resultado un gobierno de coalición con los nacionalistas (2003, 2007 y 2011).

En cuanto al PSOE, siguen a la espera de la llamada de los nacionalistas. Los de Tino Fernández se postularon desde la misma noche electoral como garantía «para acadar un acordo de goberno que permita xestionar Pontevedra con estabilidade». Los socialistas insisten en que «gran parte dos méritos que a cidadanía lle atribúe en exclusiva a Lores, acadounos cando concelleiros do PSOE formaban parte da corporación». «A xente estaría encantada -viene repitiendo el líder socialista- de que nos entendésemos pois a Pontevedra foille mellor cando nós estabamos» en el gobierno.