«Quise seguir como si pudiera salir a jugar como una más»

C. Pereiro PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Capotillo

Cristina Díaz-Pache regresa a la pista tras meses alejada de ella por una lesión

29 mar 2019 . Actualizado a las 22:42 h.

Ocho temporadas luciendo el escudo del Arxil. Cristina Díaz-Pache es una de baloncestistas más conocidas de la cancha, aunque esta temporada ha tenido que vivir las alegrías y las penas desde el banquillo. Una lesión la apartó hace a principio de temporada de la primera línea tras solo tres encuentros disputados. Hoy vuelve a saltar al ruedo. Confía en no haber perdido el toque.

-Usted se fue con un Arxil que no se encontraba en la pista y vuelve con el equipo salvado. ¿Aporta tranquilidad?

-No estábamos muy bien en ese momento. Vuelvo sin presión desde luego. Estamos llevando una línea ascendente en el juego, no como al principio. Perdimos el último partido pero las sensaciones son buenas. Espero que ahora que vuelva yo no cambien. [Ríe].

-¿Es tan difícil como parece vivir casi toda la temporada desde el banquillo?

-Mucho. Nunca había estado lesionada tanto tiempo. Alguna cosa de tobillo, pero... lo llevo muy mal en el banquillo. Sufro. Perder y volver el lunes... era duro.

-Eligió estar en el banquillo y no en la grada.

-Siempre. Seguí yendo a todos los entrenamientos. Quería seguir formando parte del equipo aunque a nivel de pista no estuviera disponible. Como si pudiera salir a jugar en cualquier momento, como una más.

-Al menos se ha recuperado totalmente, no tuvo que forzar la máquina por necesidad y complicar su lesión.

-Es que al final pasó eso al principio. Me di el golpe, hice la placa y parecía una contusión. El jueves me lo di, el fin de semana no jugué pero al siguiente sí, y al siguiente también. No iba, volvimos a hacer pruebas y...

-Menudo bajón comprobar que la cosa era más grave de lo que parecía, ¿no?

-Sí, claro. Quieres que no esté roto el escafoides pero en tu cabeza lo ves venir.

-¿Y cuando no está en la cancha a que se dedica?

-Soy fisioterapeuta. Vaya, que también llevo de baja cuatro meses.

-Justo un trabajo en el que también utiliza las manos. Qué mala suerte. Además como fisio sabía lo que se le venía encima en cuanto a recuperación.

-Sí bueno, soy mala paciente [ríe]. Quería ser optimista y volver antes pero nada, al final tenía que ser realista. Y claro, esto tenía que curar bien, del todo. Mi futuro laboral, al final, también depende de ello. Mi profesión va por ahí. Cuando lo pensé así ya asumí que no podía arriesgar nada.

-Temporada difícil para el Arxil, al menos los primeros meses.

-Un año de cambios, ¿no? Con jugadoras que se fueron, gente como Ana Martín que ya no estaba. Es un nuevo bloque el de ahora.

-¿Costó mucho mantener la cabeza fría?

-Hubo momentos difíciles. Perder jugando mal es muy duro. Supimos encontrar el camino.