«Hay que controlar tensión y azúcar para prevenir la enfermedad renal»

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

La doctora alerta del aumento de esta dolencia crónica y destaca el impacto que tiene sobre la calidad de vida

14 mar 2019 . Actualizado a las 11:31 h.

Luz Cuiña Barja (Vilagarcía, 1964) es desde el 2016 la jefa de servicio de Nefrología del Chop. Con motivo del Día Mundial del Riñón, que se celebra este jueves, la doctora alerta del aumento de la enfermedad renal, que afecta a unas 33.000 personas en el área sanitaria.

-El lema del día mundial es «Salud renal para cualquier persona en cualquier lugar». ¿Para qué sirve esta conmemoración?

-Con este día lo que se quiere transmitir es lo que es la enfermedad renal y sobre todo la crónica. Es una enfermedad cuya prevalencia está aumentando muchísimo y que tiene mucha repercusión tanto en la mortalidad de los pacientes como en la calidad de vida.

-¿De qué cifras estamos hablando?

-Hay un estudio que es la carga global de la enfermedad, que se hace a nivel mundial y estudia la salud y los factores de riesgo en muchas regiones según la edad y el sexo. En el 2017 se publicaron los datos del 2016 sobre España. Lo que nos dice es que la enfermedad renal crónica es la octava causa de muerte en el país cuando antes ni se nombraba. Hace una comparación entre el 2006 y el 2016, y así como otras causas de mortalidad como la cardiopatía isquémica o el ictus han disminuido en esa década, la enfermedad renal crónica es la segunda causa de mortalidad que más ha aumentado en esos diez años después del alzhéimer, con un 28 %.

-¿A qué se debe ese incremento de casos?

-Los pacientes con enfermedad renal crónica se mueren básicamente por enfermedad cardiovascular y por infecciones. Tienen un riesgo mucho más alto de padecer dolencias cardiovasculares que un paciente de la misma edad y sexo de la población general. En España hay casi siete millones de personas que padecen enfermedad renal, en Galicia son unos 330.000 pacientes. De estos pacientes, cuando la enfermedad llega a su estadio terminal, lo que se llama tratamiento sustitutivo renal con diálisis o trasplante, en España son unos 60.000. En Galicia son unos 3.500 y en el área sanitaria de Pontevedra hay unos 400 pacientes entre trasplantados y en diálisis.

-¿Cuáles son los factores de riesgo en esta enfermedad?

-La presión arterial y el azúcar en sangre son los dos factores en los que incide el día mundial. Son factores modificables. Hablamos de hipertensión, diabetes, sobrepeso, el fumar... todo esto hace que existe más riesgo de padecer una enfermedad renal. Son factores que se pueden modificar con unos hábitos de vida saludables.

-¿Está en manos del paciente cambiar esos factores?

-Gran parte de ellos sí. Hay enfermedades renales que son hereditarias, pero son mucho menos frecuentes. La más frecuente es la poliquistosis renal. La causa más frecuente de enfermedad renal ahora mismo es la diabetes, que causa el 24 %.

-Afecta más a hombres que a mujeres, ¿por qué?

-Sí, sigue siendo así. No está estudiado por qué.

-Habla de la repercusión social y familiar de la enfermedad...

-El impacto de la enfermedad renal es la mortalidad y los ingresos hospitalarios, pero tiene una repercusión social y familiar muy importante. Solo un 33 % de los pacientes en edad de trabajar, lo dice un estudio de Alcer, lo hacen. La enfermedad causa fatiga física, en niños dificulta la escolarización. Los pacientes tienen también un mayor riesgo de pobreza. Gran parte de los pacientes, hasta un 25 %, con enfermedad mental en estadios iniciales no lo saben, ni ellos ni sus médicos.

-¿No da síntomas?

-Hasta estadios muy avanzados puede no dar síntomas. Es muy fácil de detectar, con un análisis de sangre o de orina basta. En fases más avanzadas fatiga y pérdida de apetito son otros síntomas. Es importante que la gente se controle la tensión y los niveles de azúcar, sobre todo si tienen antecedentes familiares. Simplemente con hacer ejercicio físico de forma regular, una dieta saludable, la que todos conocemos, con poca sal y pocas carnes rojas, evitando el consumo de alimentos procesados, las bebidas azucaradas y el tabaco, y reducir el consumo de alcohol y de determinados medicamentos que aumentan el riesgo de padecer enfermedad renal, como los antiinflamatorios que usa la gente para los dolores de huesos, se puede prevenir y mejorar.

-¿Qué papel juegan los pacientes?

-La relación con los pacientes a nivel general está cambiando. Antes era paternalista, el médico, con sus conocimientos y experiencia, daba un tratamiento. Ahora tiene mucha importancia la toma de decisiones compartidas.