Os Praceres gasta en depurar agua limpia un millón de euros al año

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

RAMON LEIRO

El caudal extra se filtra del mar, varios ríos y cuando llueve en la red de saneamiento

12 ene 2019 . Actualizado a las 08:00 h.

La EDAR de Os Praceres consume cada año un millón de euros en el tratamiento de agua que no tendría que acabar nunca en sus instalaciones. Es una cifra que demuestra lo abultado del caudal extra que llega hasta la depuradora pontevedresa por las múltiples deficiencias detectadas en las redes municipales de saneamiento. Augas de Galicia estima que en un período de diez años se han gastado 8,6 millones de euros en depurar un flujo que nunca debió entrar en sus tanques. Por depurar, en Os Praceres se depura hasta agua del mar, de varios ríos como el Lameira o el Gafos y una enorme cantidad de pluviales cuando llueve fuerte. Tanta agua de lluvia se envía a la EDAR, por la falta de separativa de pluviales y fecales en muchos lugares, que la instalación no es capaz de tratarla y ni siquiera de recibirla, saturando las alcantarillas y provocando el rebose a la ría de una cantidad indeterminada de pluviales y fecales mezcladas, como perciben los vecinos de Estribela y Marín en días de temporales.

Desde Augas, dependiente del Consellería de Infraestruturas, se añade que no existe una cuantificación precisa de cuánta agua se infiltra en la red. El departamento autonómico sí ha logrado identificar los puntos por dónde se produce este acceso de caudal a mayores. No obstante, sí que se puede hacer un cálculo, en base a los valores de salinidad que se obtienen de las muestras analizadas en la entrada de la EDAR. De esta forma, por ejemplo, se puede evaluar qué porcentaje de agua salada llega a Os Praceres. El resultado no deja lugar a dudas: los valores ya solo por las infiltraciones desde el mar son «moi altos».

En un régimen de marea intermedia, en torno a un 30 % del agua que llega a la depuradora procede de la ría y entra en ella desde los múltiples fallos de las redes de saneamiento de los concellos. En régimen de mareas vivas, es decir, en aquellas ocasiones cuando el nivel del Atlántico es más alto en la ría, se alcanzan los valores máximos mensuales. Entonces hasta la mitad del caudal que llega a la EDAR viene del mar.

Aparte del hecho ya de por sí sorprendente de depurar agua de la ría, esta situación tiene otras repercusiones económicas y técnicas graves para el buen funcionamiento de Os Praceres. Según Infraestruturas, se está depurando un 43 % más de lo que se debería tratar, con su consiguiente coste.

Desde la Xunta inciden en que si se tiene en cuenta que el coste de explotación desde el 2009 ha supuesto un gasto de 28,7 millones de euros, el sobrecoste de depurar agua infiltrada en la red de saneamiento en diez años «podería estimarse en 8,61 millóns de euros», en otras palabras, el 30 % del coste de explotación de la depuradora pontevedresa. Infraestruturas entiende que esta cifra es muy aproximada a la realidad y que se llega a este resultado sin incluir en el cálculo aquellos costes fijos de la EDAR que no podrían haberse evitado.

En segundo lugar, Augas añade que el sobrecoste de la explotación de la EDAR por la entrada masiva de caudal desde el mar no es el principal problema, a pesar de la consecuencia negativa del desembolso económico extra. Se aclara desde la consellería que «a salinidade da auga afecta de forma negativa aos procesos de depuración da EDAR e reduce significativamente a eficacia dos mesmos». ¿Con qué consecuencia? Infraestruturas concreta que, por esta situación, «a calidade do efluente é menor do que debería» o que resulta «moito máis custosa de conseguir».