Desvalijan de madrugada la farmacia de Monte Porreiro

Alfredo López Penide
L. Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

LÓPEZ PENIDE

Los asaltantes forzaron la verja exterior y rompìeron la puerta de cristal interior

21 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Fue un robo a la vieja usanza. Aprovechando las horas nocturnas, los ladrones desvalijaron ayer de madrugada la farmacia ubicada en la calle Alemania, en el barrio pontevedrés de Monte Porreiro.

Para acceder al interior del establecimiento, los amigos de lo ajeno forzaron la verja exterior y, acto seguido, fracturaron la puerta de cristal interior. De hecho, horas después de consumarse el robo, en el cierre metálico aún se percibían los restos de los productos empleados por los agentes de la brigada científica de la Policía Nacional para tratar de aislar posibles huellas dactilares.

Estos, en todo caso, consiguieron hacerse con una máquina de cambio que por sí sola tiene un valor que supera los doce mil euros y que, en el momento del robo, podía guardar unos 1.300 euros. Las fuentes consultadas incidieron, asimismo, en el hecho de que este dispositivo puede pesar fácilmente entre sesenta y setenta kilos, circunstancia que implicaría el uso de un vehículo a la hora de llevar a cabo este asalto.

En cualquier caso, el robo no se quedó ahí, ya que el personal de la farmacia también habría echado en falta la caja registradora, la cual podría guardar otros tres mil euros. Por el contrario, no ha trascendido si los ladrones también se hicieron con productos farmacéuticos, ya que, al parecer, al cierre de esta edición estaba pendiente el realizar un recuento definitivo de la mercancía. No obstante, algunas fuentes no oficiales aludieron a la posibilidad de que se hubieran sustraído unos seiscientos euros en fármacos y medicamentos.

Nada más tener conocimiento del robo, la Policía Nacional desplazó patrullas, así como a los integrantes de la brigada científica. Los primeros, a decir de los vecinos de este entorno, tomaron una primera declaración al personal del establecimiento, así como llevaron a cabo un reconocimiento de la zona sin, en principio, localizar nada reseñable.

Por su parte, la policía científica centró parte de sus esfuerzos den la verja metálica violentada por los asaltantes. En este tipo de sucesos, lo habitual es tratar de localizar, además de posibles vestigios biológicos, huellas dactilares que, posteriormente, se compararan con las bases de datos policiales para tratar de encontrar correspondencias que identifiquen a los posibles ladrones.