Iria Cabo: «Hay que erradicar la idea de que el párkinson afecta solo al movimiento»
PONTEVEDRA
Pontevedra albergó una jornada informativa sobre la dolencia
07 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Las cifras del párkinson son elocuentes. Esta enfermedad neurodegenerativa afecta a unas 10.000 personas en Galicia y se diagnostican cerca de 50 nuevos casos al año. Desde la Asociación Provincial Párkinson Pontevedra apuntan que el 10 % de los pacientes nuevos padecen la enfermedad en estadio avanzado y presentan síntomas más conocidos. Son los síntomas motores como el temblor, la rigidez y la lentitud. Pero existen otros síntomas menos conocidos, que son los no motores, y a ellos hay que prestar especial atención.
Esta fue una de las conclusiones de una jornada informativa sobre la enfermedad de Párkinson que se celebró recientemente en Pontevedra. Entre esos síntomas no motores figuran los trastornos del ánimo (apatía o depresión) y la conducta, los problemas del sueño o el estreñimiento. Problemas que condicionan mucho la calidad de vida.
La neuróloga del Complexo Hospitalario Universitario de Pontevedra (Chop) Iria Cabo fue una de las ponentes en la jornada celebrada en el Hospital Provincial junto a Josefa González, auxiliar de enfermería de la consulta de Neurología, y Begoña Cerqueiro, presidenta de la Asociación Provincial Párkinson Pontevedra. «Lo que pretendemos es informar sobre los diferentes síntomas que se pueden presentar, principalmente, en la enfermedad de Párkinson avanzada, para que tanto pacientes como cuidadores puedan detectarlos lo antes posible y trasladarle esa información a su neurólogo», señaló la doctora. La especialista aludió a que es fácil reconocer determinados síntomas en el desarrollo de la consulta entre paciente y neurólogo a través de la exploración pertinente, pero en otros casos es fundamental la colaboración del enfermo o cuidador para que transmita su aparición. «Eso a veces es complicado porque son síntomas que muchas veces no asociamos con el avance de la enfermedad», afirmó la médica.
Iria Cabo remachó que cualquier síntoma de nueva aparición debe comentarse en la consulta con el neurólogo para poder esclarecer si está relacionado con la enfermedad. Para ello es fundamental la confianza con el especialista. «Paciente y cuidador deben estar atentos a cualquier cambio. Hay que erradicar la idea de que esta enfermedad afecta exclusivamente al movimiento porque no es así», subrayó la neuróloga, que recomendó preparar la visita al especialista y, si es necesario, llevar anotados incluso los cambios sufridos.