El pasado verano, cuando Sergio Vega se proclamó campeón de España confesaba que su sueño era dar el salto a la competición profesional. Acababa de llegar al Froiz con la intención de que el equipo de Evaristo Portela fuese el trampolín para poder dar ese empujón. Semanas después, cuando acabó la campaña, el corredor cántabro esperaba que le llegasen ofertas. Estaba dispuesto a arriesgarse. Después de un año brillante, todo apuntaba a que habría alguna propuesta que le entrase por el ojo. Y así fue. Sergio Vega dejará las filas del conjunto alimenticio para competir en Portugal con el Miranda-Mortágua. «Estoy muy contento y con ganas de hacer las cosas bien», explicaba el corredor desde su casa de Cantabria. Reconoce que apenas tuvo dudas sobre su futuro. Hace días que conocía la intención del equipo portugués, pero esperó un tiempo por si llegaba alguna más. «Es la primera que recibí y no tuve ninguna más», confiesa un Sergio Vega que está pletórico. Llega a su nuevo equipo con el aval de haber logrado el título nacional, la Vuelta a Coruña y la Vuelta a Galicia. No pudo ser un año mejor. Desde el Froiz felicitan al corredor por su nuevo fichaje y le «deseamos mucha suerte en su nueva etapa».
Aunque todavía está por concretar las pruebas españolas en las que participará el Miranda-Mortágua, Vega cree que todo apunta a que disputarán la Vuelta a Asturias, la de Castilla León y la ronda madrileña. «El equipo al que voy, subió el año pasado de categoría y en principio estaré un año, espero hacerlo lo mejor posible para cambiar de categoría», señala Sergio Vega, que en cuatro años saltó de sub-23 a élite y ahora un año después, a profesional. Sus cualidades llamaron entonces la atención del Froiz, que ya veía que podía escapársele a final de temporada. Evaristo Portela recalcó desde el primer momento que era un corredor muy completo, especialmente en las cronos, pero que sobre todo «sabe leer moi ben as carreiras».