Agentes del Greco declaran con la cara tapada para no ser reconocidos por los acusados en la vista
PONTEVEDRA
Los cerca de 20 agentes del Grupos de Respuesta Especial para el Crimen Organizado (Greco) que participaron en la operación Santa (permitió el decomiso en el 2015 de cuatro toneladas de hachís y 580 kilos de coca y la detención de los narcos Francisco Javier Fernández Pomares, O Peque, y Lorenzo Toledano) empezaron a prestar declaración ayer en una nueva jornada del juicio por esta causa en la sección tercera de la Audiencia Nacional. La gran novedad, y logro para el Greco, fue conseguir que los funcionarios declarasen en sala con el rostro cubierto para no ser reconocidos por los acusados, ya que muchas veces se repiten en diferentes investigaciones.
Es el caso, por ejemplo, de David Pintor, detenido hace tres años en la operación Santa, en libertad con cargos a la espera de este juicio desde entonces pero detenido nuevamente este verano. ¿El motivo? La incautación de una tonelada de hachís en Murcia en la que también estaría implicado, según la Policía Nacional. «Es un logro, sobre todo para los agentes, que pueden seguir trabajando en la calle sin riesgo de ser reconocidos. El caso de David Pintor es uno más, pero deja claro que muchos de estos investigados, si están en la calle y teniendo causas pendientes, vuelven a intentarlo». El citado David Pintor, tras ser detenido este verano, recuperó la libertad ese mismo día pagando 40.000 euros de fianza.