Destrozan cuatro mil metros de viñedo en Meis

m. a. MEIS / LA VOZ

PONTEVEDRA

OSCAR VíFER

Los vándalos cortaron todas las sujeciones de la vid y dejaron tirada en el suelo la cosecha de este año

17 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Unos viticultores de Meis se llevaron ayer por la mañana una desagradable sorpresa. Fueron unos vecinos los que los alertaron de que su plantación de seis mil metros cuadrados había sido víctima de un acto vandálico. Lo sospechoso es que los destrozos no fueron hechos de cualquier forma, cortando las vides o arrancando los racimos. Alguien se tomó la molestia de cortar y arrancar todos los alambres y cadenas que forman el emparrado por el que crece la planta. El resultado es que toda la cosecha está actualmente en el suelo y, alguna, bastante dañada.

«O que o fixo sabía o que facía», se quejan los propietarios de la finca, que aseguran ignorar quién puede estar detrás de todos estos daños. Explican que el autor de los destrozos quería asegurarse de que las plantas se venían al suelo. Por eso cortó, en primer lugar, las cadenas que sujetaban las plantas. Por si esto no fuera suficiente, soltó también todos los tubos, «porque quería asegurarse de que as plantas caían», asegura la damnificada. El resultado es que no solo han causado daños en la cosecha de este año, que está toda por los suelos, sino que también se ha desmontado por completo la estructura de la plantación. Un trabajo que, insisten los afectados, debe hacerse con cuidado «porque as cadeas poden vir rebotadas», argumentan.

Los propietarios de la finca calculan que los daños afectan a una extensión de cuatro mil metros cuadrados, de los seis mil que tiene la plantación. Por fortuna, la uva no se ha perdido toda. «Imos intentar sacala. Hai unha parte que está aplastada, pero hai outra que creemos que se pode levantar. Teremos que vendimar agachados», aseguran. El problema son los desperfectos ocasionados en el emparrado, que tendrá que ser rehecho de nuevo. Los afectados han presentado una denuncia ante la Guardia Civil para tratar de encontrar a los responsables.