La fiscala rebaja a 15 años la petición de prisión por el crimen de Lérez

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

López Penide

Considera que, a la vista de las pruebas, no es un asesinato, sino un homicidio

28 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Si al comienzo del juicio contra los supuestos autores de la muerte de la pontevedresa Pilar Fernández Otero, de 87 años, la Fiscalía solicitaba veintiocho años y medio de cárcel para los dos sospechosos, ayer la representante del ministerio público rebajó esta petición de pena hasta los quince años. «Nos guste o no nos guste, estemos o no de acuerdo», señaló al respecto de que, según la jurisprudencia del Supremo, se dieron en este caso una serie de circunstancias que no podía pasar por alto y que determinaron este cambio.

En este sentido, reseñó que se deben tener en cuenta dos atenuantes -«la confesión es evidente y son consumidores desde hace tiempo de drogas»- que compensan la aplicación de otras tantas agravantes.

A la vista de las pruebas practicadas en el juicio, estimó que no se puede hablar de un delito de asesinato -solicitaba veinte años-, sino de un homicidio por el que pidió once años y medio. Asimismo, y dado que «no ha quedado acreditado» cómo José Manuel González Cruz y Constante Sánchez Penelas entraron en la casa de la víctima horas antes de que cometiesen el crimen, sustituyó los tres años y medio por un robo con fuerza por una multa por un delito leve de hurto.

En cuanto al segundo cargo de robo, si inicialmente se instaba a una condena de cinco años al tener en cuenta solo las agravantes de disfraz y abuso de superioridad, al aplicar las atenuantes se redujo a los tres años y medio. Ya por último, la multa derivada de la sustracción de un coche se sustituyó por trabajos en beneficio de la comunidad, ya que ambos son insolventes y se estimó que era mejor castigo dada su situación.

Las defensas se adhirieron a todos estos planteamientos que hoy serán trasladados al tribunal del jurado para que emita un veredicto que se espera que se conozca a lo largo del día de hoy. En cuanto a las pruebas que la fiscala esgrimió para sustentar las imputaciones, citó la propia confesión de los acusados y las declaraciones de los distintos testigos que comparecieron en estas tres jornadas de juicio.

«La golpearon repetidamente en zonas vitales del cuerpo (...) y la dejaron a su suerte»

Las forenses que le practicaron la autopsia a Pilar Fernández reseñaron ayer en la Audiencia de Pontevedra que las lesiones más graves y que, a la postre, le ocasionaron la muerte no eran visibles. Aludiendo a sus palabras, la fiscala mantuvo que los acusados «la golpearon repetidamente en zonas vitales del cuerpo» causándole la rotura del bazo y la fractura de seis costillas.

La fiscala incidió en que «hay que tener en cuenta los actos posteriores» de los acusados, los cuales «dejaron a su suerte» a la pontevedresa. En cuanto al trasfondo, remarcó que tenía «la práctica convicción de que actuaron porque creían que tenía dinero porque se iba a pagar la obra» del muro de su vivienda. «No lo encontraron [la primera vez que robaron en la casa] y es lo que les llevó a volver esa noche», añadió, al tiempo que también señaló que pudieron pensar que habría cobrado la pensión. «No es casual que fueran ese día».