Tras el funeral de Gonzalo Adrio, políticos y amigos destacaron su defensa de la justicia y de la democracia
03 ene 2018 . Actualizado a las 05:05 h.En una mañana lluviosa y gris tocó darle el último adiós a Gonzalo Adrio Barreiro, que falleció el primer día de 2018 a los 98 años de edad. El funeral se celebró en la iglesia de San José de Campolongo y, tras él, políticos y amigos -había una amplia representación de la abogacía y de la judicatura de la ciudad- en un intento por poner calor a un día frío, recordaron los valores que él tanto defendió. Le retrataron, más allá de sus logros laborales y políticos, como un hombre justo y bueno. Las palabras de cariño hacia el fallecido, así como la música del funeral, ayudaron a temperar un día realmente triste.
Tras ser velado en el tanatorio en Virgen del Camino, la comitiva fúnebre con los restos de Gonzalo Adrio llegó a Campolongo a las once de la mañana. El coro del colegio de abogados puso música a la despedida de un «abogado muy destacado», como lo definía ayer el director de la agrupación musical. Entre las piezas que cantó el coro para él estuvo el emotivo Ave Verum Corpus de Mozart. La música se acompañó también de emotivas palabras cuando, al término del funeral, su hija María puso voz al agradecimiento de la familia por todas las numerosas muestras de afecto que recibió tanto de forma pública como privada.
El funeral de Gonzalo Adrio congregó a políticos de distintos colores, aunque especialmente representada estuvo la familia socialista gallega, a la que el fallecido pertenecía. El máximo espada del PSdG, Gonzalo Caballero, dijo que Adrio representaba los mejores valores del socialismo y que, recientemente, con motivo de las elecciones primarias que se vivieron en la formación del puño y la rosa en Galicia, lo había escuchado para tomar nota de sus consejos. También destacó la importancia de su figura la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, que recordó lo mucho que luchó Gonzalo Adrio para que no se olvidase a las víctimas de la dictadura. Silva dijo que hay que seguir su línea ya que «un pobo que non coñece a súa historia corre o risco de repetila». Al funeral asistió también el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, que dijo que al abogado y exdiputado fallecido era «un referente para a cidade».