Cabomar se reinventa apostando por el refrigerado y prevé acabar el año con la facturación al alza
PONTEVEDRA
La firma, ubicada en el puerto de Marín, emplea a 240 personas
15 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Cabomar, una empresa ubicada en el puerto de Marín, fue noticia en distintas ocasiones por cuestiones peliagudas. Hace años, cuando todavía se llamaba Tradepana, sufrió un incendio que se llevó por delante sus instalaciones. Luego estuvo años envuelta en el conflicto jurídico de los rellenos portuarios de Marín. Y de un tiempo a esta parte, como reconocía ayer su director general, Enrique Freire, vive un período de tranquilidad. Hay calma, pero no relajación. Porque la firma ha crecido sobremanera. En el 2016 facturó 74 millones de euros, casi un 40 % más que el ejercicio anterior. Y el ejercicio actual, según indicó Freire, lo terminará con un volumen de negocio de entre 85 y 90 millones. ¿Cómo se logró esa subida? «Apostando por innovar, por nuevos productos, por automatizar nuestras líneas y, por supuesto, invirtiendo mucho, como por ejemplo en la nueva línea de refrigerados», señaló el director general.
Y es que Cabomar, especialista en elaborado y procesado por productos del mar -sobre todo cefalópodos y calamares- se abrió al segmento de los refrigerados. Comercializa, por ejemplo, filetes de bacalao o lomos de pez espada que luego se venden en el mercado de fresco. Para poner en marcha esta línea, así como para mejorar la eficiencia energética y automatizar otros segmentos de negocio, se invirtieron 1,8 millones de euros. Se recibieron ayudas públicas, como explicaba Freire. Así que ayer la firma abrió las puertas a la conselleira de Mar, Rosa Quintana, que supervisó las instalaciones. Quintana puso a Cabomar como ejemplo de una empresa que apuesta por la internacionalización. Y es que, aunque su mercado más fuerte es el español, el 70 % de la facturación procede de otros países, siendo Italia, Francia, Alemania y Portugal sus referentes.
La plantilla y el futuro
Cabomar cuenta actualmente con una plantilla de 240 personas. La firma movió el año pasado un total de 23.000 toneladas de producto. ¿Cómo será su futuro? «Seguiremos en la misma línea, apostando por innovar continuamente», indicaba ayer Freire. Los productos de las compañía se venden, sobre todo, como marcas blancas de distintas cadenas de distribución; desde calamares a la romana a pulpo y otros muchos productos marinos.