«Sinceramente, no me veo a día de hoy luchando por el play off»

carmen garcía de burgos PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

RAMON LEIRO

Estandarte de cautela, prudencia y humildad, «Jabato» acaba de colocar al Cisne líder de la División de Honor Plata

26 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

A Javier Fernández, Jabato (Ciudad Real, 1980) se le notan los años de oficio incluso en los buenos momentos. Y la serenidad.

-Líderes de Plata en solo tres jornadas. Enhorabuena.

-Quién nos lo diría, ¿no? Nadie nos ha regalado nada. Tenemos tres victorias en tres partidos. Estoy muy contento pero también con los pies en el suelo, sabiendo que las derrotas caerán. Hay que estar también alerta en este sentido y seguir trabajando de la misma manera, con humildad, y sabiendo que, si hemos conseguido tres, podemos conseguir la cuarta, y si viene la cuarta no quiere decir que vayamos a encadenar muchas más. Tenemos que seguir manteniendo el nivel de trabajo, esa actitud durante la semana, y esperemos que nos siga dando frutos.

-Todavía es muy pronto, pero ¿es difícil no hacerse ilusiones?

-No, no lo sé. Yo lo veo muy complicado, y se ven resultados de todo tipo. ¿Quién te dice que ahora que has conseguido una racha tan positiva, no encadenas una negativa? Vamos a hacer todo lo posible para que eso no llegue, pero puede pasar. Se están dando resultados completamente raros o extraños. A ninguno de los dos líderes antes de estas tres jornadas nos daría nadie como favoritos o para estar invictos a estas alturas. Es muy extraño. No hay que lanzar las campanas al viento, porque va a haber que pelear y trabajar mucho.

-El mismo entrenador, gran parte de la plantilla... ¿Qué está cambiando entonces en el Cisne?

-Bueno, hemos cambiado bastante. Al final han venido seis jugadores nuevos, a los que les falta rodaje, y esperemos que vayan a más conforme avancen las semanas y los partidos. Hemos mantenido el bloque, pero se ha incorporado gente joven y nueva, y eso hace que a día de hoy no esté la plantilla rodada. Vendrá todavía mucho que mejorar. Creo que tampoco somos un equipo muy diferente al del año pasado. Se nos ha ido un jugador referente como era David Chapela y han venido otros en otros puestos específicos, pero que también están aportando. No sé muy bien qué decirte en cuanto a qué ha cambiado. Somos los mismos con gente nueva. Mantenemos el nivel y vamos a intentar que sea parecido al del año pasado.

-¿Sigue siendo el objetivo la permanencia, o va la cosa subiendo las expectativas?

-Yo espero tener un año lo más tranquilo posible, y eso pasa por sumar puntos lo antes posible y estar en la zona tranquila lo antes posible, y salvarse lo antes posible. A partir de ahí, cada uno luego es ambicioso, y vamos a intentar ir a ganar en cualquier pista. Luego pasará lo que pase, pero la idea es ser lo más competitivo posible. Algunos días ganaremos y otros no lo lograremos. No recuerdo la pregunta... (ríe).

-Si la permanencia sigue siendo el objetivo...

-Sí, sí. De momento, el objetivo que nos hemos marcado es afianzar el equipo en la División de Honor Plata y, a partir de ahí, todo lo que venga genial. Pero lo principal e que el Cisne esté más años en esta división.

-Son el equipo que más goles ha metido, pero su máximo goleador es el decimoctavo de la categoría y el segundo, el 46...

-Somos un grupo en el que todos tienen que sumar y aportar, ya que no tenemos, como el año pasado, a Chapela, que era nuestro referente en ataque, Ahora todo el mundo tiene que aportar y sumar, y quizás en eso también está un poco la clave de dónde estamos. Todo el mundo tiene que aportar su granito de arena, todos tienen que marcar. No hay ninguno que destaque de forma alarmante sobre el resto. Y, al final, tenemos varias opciones para conseguir gol. Estoy contento porque tenemos una plantilla amplia, y eso te da ese recurso que a lo mejor otros equipos no tienen.

-Pues el sistema funciona...

-De momento, sí, (ríe). Llevamos tres victorias , pero esto puede cambiar de la noche a la mañana. Hay que estar alerta. Yo sigo alerta. Sé que pueden venir mal dadas y hay que estar preparados. De momento, funciona, hay que apostar por ello, pero ya veremos adónde llegamos.

-La próxima semana se enfrentan al Alarcos, la siguiente al Barça y dentro de tres a Los Dólmenes. ¿Va in crescendo?

-Sí, son tres partidos muy complicados. Los dos de fuera por ser fuera y por medirte a los rivales a los que nos estamos midiendo, como el Alarcos, que ha confeccionado una plantilla con el objetivo pleno de subir y jugar el año que viene en Asobal. Los Dólmenes están un poco como nosotros; no ha perdido ningún partido, ha ganado dos y ha empatado otro, y en una pista tan complicada como Nava, que es otro de los favoritos de la liga. Y luego recibimos al Barça que, aunque ha empezado de una forma no tan suave como otros años en cuanto a victorias, es un equipo con gente joven pero con mucha calidad y proyección, que seguro va a ir a más. Así que tampoco nos fiamos. Va a venir aquí a dar el máximo y a ponernos las cosas muy difíciles. Por eso hay que estar alerta. Son tres partidos muy complicados, y si contamos el cuarto, el del viernes en Copa del Rey, son cuatro. Nosotros seguimos con la idea de seguir siendo los mismos, con humildad, y de afrontar el partido que venga e intentar sumar. A ver en qué puesto estamos después de esos cuatro partidos.

-Y, con toda la humildad del mundo, ¿con quién se ven luchando por el play off?

-No lo sé. A día de hoy se están dando muchos resultados que no eran los que todos pensaban, y no se sabe. Yo tampoco me veo a día de hoy luchando por el play off, sinceramente te lo digo. Puede pasar, ojalá que se diera un poco como el año pasado. Pero a día de hoy no me veo. Tienen que pasar muchas jornadas para ver cómo se va colocando la clasificación y los equipos. Pero está muy complicado. Se está viendo que cualquier equipo puede perder o ganar en cualquier pista. Hoy estamos en una situación privilegiada, disfrutemos del momento. Yo disfruto del momento. Mañana ya toca trabajar para el partido del viernes y ya me olvido, porque sé que lo que viene va a ser muy difícil.