Personal y usuarios salen a la calle para defender una sanidad universal y pública

Cristina Barral Diéguez
cristina barral PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

Marea Blanca destaca el valor de la movilización social y reclama más inversión para garantizar una atención de calidad

08 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La sanidad pública no se vende, se defiende. Con esa máxima, trabajadores y usuarios de la sanidad pública salieron ayer a la calle para conmemorar el Día Mundial de la Salud. Lo hicieron secundando el llamamiento de Marea Blanca Pontevedra, que convocó una concentración en la plaza de A Peregrina e instó a vecinos e instituciones públicas a que colgaran sábanas blancas de ventanas y balcones como gesto simbólico en defensa de «una salud universal y una sanidad pública 100 %».

La petición no tuvo un alcance masivo, aunque en edificios de algunas calles sí se dejó sentir. En el acto central, celebrado a las ocho de la tarde, Fernando Miguez, médico jubilado, leyó un manifiesto en el que se pidió a Gobierno central y autonomías que inviertan más «en la atención médica de calidad y dejen de tratar a la salud como una mercancía».

Aunque a nivel estatal se aludió al «desmantelamiento progresivo» del sistema nacional de salud y a la «gravísima degradación» que afecta a la sanidad pública en todas las autonomías, la coordinadora estatal de Marea Blanca considera que esa situación puede ser revertida.

En Pontevedra, exigen que la ampliación del Hospital Montecelo se construya con financiación «plenamente pública» y que su gestión sea «totalmente pública». Con respecto al Provincial, tanto Marea Blanca como la Asociación Galega para a Defensa da Sanidade Pública coinciden en que deberá mantener en el futuro un uso sanitario con diveras actividades asistenciales.