Imputado por la muerte violenta de varios perros

Alfredo López Penide
López Penide PONTE CALDELAS / LA VOZ

PONTEVEDRA

Este vecino de Ponte Caldelas no tuvo mejor idea que no retirar el cadáver de una oveja para que fuese devorado por sus canes

29 mar 2017 . Actualizado a las 17:24 h.

Un vecino de Ponte Caldelas está siendo investigado por el Seprona de la Guardia Civil de Pontevedra ante la sospecha de que sea el responsable de la muerte de varios perros, alguno de ellos con brutales signos de violencia.

La investigación arrancó con el hallazgo de varios cadáveres de canes en un monte de este municipio pontevedrés. Las pesquisas llevaron a los agentes hasta un cercado con varios galpones construidos de forma muy precaria con paneles y verjas metálicas. En su interior, localizaron varios perros que mostraban una delgadez manifiesta.

En este espacio, se contabilizó hasta una decena de canes de diferentes razas y tamaños. Mientras cuatro de ellos estaban sueltos, el resto, atados con cadenas. Eso sí, todos ellos sin chip de identificación y con evidentes síntomas de desnutrición. De igual modo, las condiciones higiénico-sanitarias eran deplorables, sin agua ni comida a la vista.

Asimismo, las construcciones tenían elementos cortantes y punzantes, mientras que el suelo un verdadero barrizal lleno de excrementos. 

Desde la Comandancia reseñaron que, en el interior del cierre, hallaron un caballo y cuatro ovejas, una de ellas muerta. Todos los animales carecían de los preceptivos distintivos de identificación. El propietario explicó a los guardias civiles que había dejado el cadáver de la oveja para que la comieran los perros.

Por si no fuera bastante, tanto el interior como el exterior de la parcela, estaba sembrado con toda clase de huesos -entre ellos, sobresalían cinco cráneos-, así como se hallaron los cuerpos sin vida de otros dos perros. La necropsia determinó que uno presentaba una brecha abierta en el cráneo.

Ante este escenario, la Guardia Civil requirió el apoyo de los servicios municipales y del equipo veterinario del Centro de Acollida e Protección de Animais (CAAN) que, de forma cautelar, se hicieron cargo de los perros. Desde la Comandancia añadieron que, dadas las pésimas circunstancias higiénico sanitarias, el estado de inanición de los animales y las evidencias de que más de uno había sido sacrificado de forma violenta, el Seprona citó a esta persona en calidad de investigado como supuesto autor de un delito de maltrato animal. 

De igual modo, el Seprona denunció a este vecino de Ponte Caldelas por una serie de infracciones en materia de sanidad animal, medio ambiente y gestión de residuos, que serán resueltas por vía administrativavari.