La pobreza energética de algunos hogares obliga a las ONG a actuar

María Hermida
maría hermida PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Cruz Roja y Cáritas tuvieron alertas para llevar estufas a familias sin recursos

10 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El frío tardó en llegar. Pero finalmente llegó y, relacionado o no con él, los hospitales empezaron a saturarse con casos de gripes e infecciones respiratorias. Paralelamente, la pobreza energética de algunos hogares empezó a evidenciarse. Lo cuentan desde las delegaciones pontevedresas de Cáritas o Cruz Roja, en las que recibieron alertas para llevar estufas a familias que, o no tienen calefacción, o no disponen de recursos suficientes para poder ponerla en funcionamiento.

Cruz Roja explica que hace tan solo unos días que llevó, de forma urgente, una estufa a una persona mayor. No es un hecho aislado, sucede con cierta frecuencia. ¿Cómo detectan la necesidad de calor en algún hogar? En cuanto empieza a hacer frío, los voluntarios del servicio que se encarga de llamar o visitar periódicamente a personas mayores les preguntan especialmente por la situación energética del hogar, comprueban si tienen estufas o sistema de calefacción y si está funcionando bien.

Algo parecido cuentan desde Cáritas. Aunque este año el frío vino más tarde de lo normal, ya tuvieron también alertas para llevar estufas. En el caso de Cáritas, lo que hace es suministrar aparatos que se mantienen con la clásica bombona. La trabajadora social explicaba que el funcionamiento de estas estufas suele ser mucho menos costoso que una calefacción eléctrica. Añadía que detectan la pobreza energética en las visitas periódicas que hacen a las familias en riesgo de exclusión social y que se encuentran con dos tipos de casos «los que no tienen ningún aparato de calor y los que cuentan con calefacción pero su situación económica no les permite usarla».

En Cáritas hablan también de la situación de los indigentes. Indican que, pese a las bajas temperaturas de estos días, tienen el albergue de Monteporreiro al 50 % de ocupación. No registraron repunte de pernoctas por el frío. Indican que hay personas que duermen en la calle que, por no adaptarse a las normas o por cualquier otra cuestión, no quieren acudir a este centro. En Cáritas disponen de mantas para quienes las necesiten. Desde la entidad Boa Vida señalaban que también las tienen. En este caso, las venden a un precio simbólico.