Los azules perdieron acierto e intensidad tras el primer cuarto, y permitieron a los catalanes agrandar la diferencia sin mostrar un gran juego
30 nov 2016 . Actualizado a las 04:00 h.Se fue desdibujando el Marín Ence Peixe Galego a medida que avanzaba el partido. Salió a la cancha con más intesidad que el Actel Força Lleida, al que dominó claramente durante casi todo el primer tiempo. Pero, rozando los tres minutos para el final del cuarto, a los azules se les escapó la suerte y, con ella, la puntería, la confianza en sí mismos y la intensidad. A borbotones. Y no fueron capaces de curar la herida, que se convirtió en brecha.
Hasta cinco puntos de ventaja llegaron a sacarles los marinenses a los catalanes antes de que empezara la caída libre. Un buen ataque y un juego rápido y de equipo parecían marcar el curso natural del partido. Pero se fue desviando tanto que a los tres minuto del segundo tiempo resultaba difícil ver el punto de origen. El porcentaje de triples fallidos comenzó a subir casi al mismo ritmo que el de los tiros de dos que se empeñaban en evitar el aro. Lo sufrió especialmente Múgica, que lo intentó desde todos los ángulos sin que ninguno pareciera dispuesto a ceder a sus intentos. Con lógica científica algunos de ellos, y por alguna razón que se escapaba a la razón en otros.
Ni tiros libres
Más difícil explicación, y menos justificación aún, tenían los rebotes que se les escapaban de las manos a los peixiños para caer en las de los visitantes, y los tiros libres que, aunque en pequeñas cantidades, habrían contribuido a tapar el coladero por el que parecía escurrirse cualquier posibilidad de victoria del Peixe Galego. O, al menos, de reducir una diferencia que se agrandaba por momentos. La progresión se iba reflejando en el marcador, testigo fiel de la mala suerte y de la floja defensa que puso sobre la pista el equipo local. Solo durante unos segundos, los que duraron los triples de Múgica y Miso y el mate de Cain (en el minuto 6 del segundo cuarto), se palpó la ilusión de que la magia podía regresar A Raña.
Pero ni el cuestionado arbitraje -que llevó al colegiado a amenazar al entrenador del Lleida con la expulsión y a ser abucheado también por la afición local- ni el tiempo muerto que pidió Llorente, ni su intento de controlar el juego sacando a Manu Ferreiro para reforzar el trabajo de Derksen y la posesión del balón, hicieron ninguna diferencia.
De Simeón a Derksen
Tampoco el descanso. No iba un minuto del tercer tiempo cuando los visitantes volvían a anotar, y siguieron haciéndolo hasta la mitad del cuarto, mientras el Peixe se conformaba con los cuatro tiros libres que encestó Derksen tras sendas faltas (34-50 en el minuto 5). El de Arizona intentaba tapar los agujeros que dejaba el marcaje al que los rivales tienen acostumbrado a Cain, la falta de tino de Cabanas y la de intensidad del resto del equipo azul. Un ejemplo de lo que podría haber sido y no fue lo protagonizaron Cain y el propio escolta norteamericano en una de las pocas asistencias dignas de recordar de los locales. También el triple del pívot de EE UU y la breve reacción ofensiva que tuvieron los marinenses durante los segundos finales, que propició que Miso y Simeón los vieran desde el banquillo con molestias.
Ninguno de los jugadores del Peixe se salió del cuadro que pintó una derrota clara y merecida para el recién ascendido a LEB Oro. Levantó algo el vuelo en el último cuarto e intentó aprovechar la bajada de guardia de los catalanes, que cedieron las pocas jugadas redondas a Simeón -tanto en sus dos triples como con su robo en contraataque que envió largo a Derksen para que anotara-. Pero ni lo suficente ni a tiempo.
Parciales: 18-19, 12-29 (30-48, descanso), 14-17 (44-65), 18-20 (62-85, final)
Árbitros: Juan Alberto Inela García y Cristian José García Rodríguez
Incidencias: Partido disputado en el pabellón municipal de A Raña ante unos 250 espectadores
Cain (11), Cabanas (2), Simeón (6), Miso (15), Derksen (18) -quinteto inicial-, Alec, Bauzá, Ferreiro (2), Múgica (6), Homs (2)
Nevels (12), Mbyae (9), Sevillano (9), Agustí (3), Demetrio (6) -quinteto inicial-, Hermet (3), Feliu (16), Rubin de Celis (7), Sutina (4), Alzamora (4), Martí (12)