Soutomaior quiere ser castillo familiar

carmen garcía de burgos PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

XOAN CARLOS GIL

La Diputación pone en marcha un ambicioso proyecto de reforma del complejo

16 sep 2016 . Actualizado a las 17:28 h.

El castillo de Soutomaior se ha propuesto convertirse en el espacio familiar de la provincia por excelencia, y la Diputación tiene previsto invertir entre tres y cuatro millones de euros durante la presente mandato para que lo consiga. Solo este año han sido 210.000 y el próximo serán otros 600.000. La materia prima la pone el complejo arquitectónico, y la apuesta económica corre por cuenta de la institución provincial tras consensuar su proyecto -«serio», progresivo y que persigue convertirlo en «un dos espazos turísticos máis atractivos de Galicia»- con el Concello y la concesionaria, que seguirá prestando sus servicios en eventos privados, según adelantó ayer la presidenta, Carmela Silva, acompañada del diputado de Turismo, Santos Héctor.

A pesar de lo extenso del plan, los resultados empezarán a verse en cuestión de días. De siete para ser exactos, ya que el próximo viernes, día 23, se pondrán en marcha las visitas teatralizadas, en las que un grupo de actores darán vida a personajes clave en la historia del complejo de Soutomaior en un entorno ambientado en la época. Tendrán un coste de dos euros, una duración de 45 minutos y un eco que se prolongará hasta el 23 de octubre, cuando se ofrezca el último pase -los jueves y viernes serán a las 17 horas, los sábados a las 11 y a las 17, y los domingos a las 11-. Habrá que reservar en Turismo Rías Baixas.

La inversión se repartirá entre cuatro grandes áreas que sufrirán mejoras: jardín, castillo, enoturismo y hostelería. En el primero de ellos se reflejarán en las plantaciones y el parque forestal (ya en curso), los cultivos la accesibilidad y movilidad (se está instalando ya la señalización interpretativa), la realización de paseos, itinerarios y zona de pícnic, actividades y exposiciones, micropaisajes ligados a las cosechas, y en estas últimas, que podrán ser recogidas por los visitantes en una cesta que se les dará al entrar para que las disfruten en sus casas.

El castillo contará con una zona de recepción de visitantes y una pequeña tienda, y acogerá más eventos y reuniones. Esa es, al menos, la intención de la Diputación, que también quiere dar un impulso enoturístico al complejo. Lo hará creando en su interior un complejo de la Camelia que albergará la Casa del Té y jornadas florales y cosméticas, entre otras. También habrá una zona de exposición y venta de vino y visitas guiadas a los viñedos.

La hostelería será la cuarta pata de la mesa sobre la que se posará, según los planes del ente provincial, el turismo familiar del interior y exterior de Galicia. Y lo hará apoyándose en cabañas que den cobijo a los asistentes a los eventos cuando llueva. Funcionarán únicamente durante el día y en eventos de tarde, pero no servirán de alojamiento.