Saavedra busca su disparo de oro

manu otero PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

cedida

El tirador pontevedrés ultima su preparación para el debut en los Juegos

07 sep 2016 . Actualizado a las 08:27 h.

El telón olímpico vuelve a levantarse mañana en Río y en la capital carioca se concentran ya los aspirantes a colgarse las medallas de oro. Uno de ellos es el pontevedrés Juan Saavedra que lleva una semana aclimatándose y entrenando en Brasil con el objetivo de subirse a lo más alto del podio en las dos modalidades en las que participará. «Yo aquí he venido a luchar por las medallas, me encuentro bien, me están saliendo las cosas y no descarto nada. Estoy mejor de lo que me esperaba, aunque eso tampoco es garantía de nada», afirma el tirador pontevedrés.

A la villa olímpica llegó el pasado 31 de agosto y su adaptación ya es plena. «Nos han recibido bien y de jet lag, cero», señala. También ha tenido tiempo de probar el escenario en el que iniciará la competición el próximo sábado en la modalidad de carabina aire tendido 10 metros. «La instalación está muy bien, esperábamos encontrárnosla peor, a mí me gusta, me gustaría tenerlo en España o en Pontevedra», exclama el tirador. No obstante hay factores ajenos a la instalación que pueden ser decisivos en la competición. «En la prueba de 50 metros, la lluvia, la luz, el viento... Ayer se levantó un vendaval que nos movía el monitor», ilustra el tirador una de las principales dificultades de su deporte. «Hay que adaptarse y esa es la parte complicada», asume.

No es el único enemigo al que deben hacer frente los tiradores. Saavedra debuta el sábado en la modalidad de carabina tendido 10 metros. Una prueba que se lleva a cabo en una galería cerrada y con luz artificial, por lo que el enemigo no será el viento, sino la presión y los nervios. «Esto es una cuestión de confianza, sé que vengo bien preparado, pero hasta que llegue el día no lo sabes y la presión la vamos a tener todos», reconoce el pontevedrés que tiene su propio método para vencer «una presión que a mí me gusta», confiesa. Con la carabina en ristre, «yo intento centrarme en ejecutar el tiro bien, repasarlo todo mentalmente, visualizar el tiro y estar concentrado nada más que en tirar, así el resto de las cosas se te van olvidando», razona Saavedra.

Llevar el nombre de su ciudad y defender los colores de su país es «un motivo de orgullo» y aunque todavía no sabe cómo celebrar la consecución de una medalla, promete «salir a cenar e ir de fiesta», aunque es cauto y prefiere no adelantar acontecimientos.

Para asegurar sus opciones de medalla, Saavedra renunció a la prueba de carabina de pie. La que peor preparada llevaba y que le restaría opciones de medalla. Así el pontevedrés iniciará la conquista por el oro el sábado y la terminará el día 14 en la distancia de 50 metros.

Todo un reto de superación al que la organización le concede menos valor que a los olímpicos. «Ojalá algún año nos lleguen a equiparar, habrá que seguir luchando» promete el pontevedrés con mejor puntería.