Un campeón de muay thai con galones

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

La espectacularidad de los combates de Marcos Canosa queda patente en la imagen.
La espectacularidad de los combates de Marcos Canosa queda patente en la imagen. Fotos < / span>defensa< / span>

El teniente Marcos Canosa, de la Brilat, acaba de revalidar el campeonato de España amateur

06 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El muay thai es el deporte por antonomasia de Tailandia, el mismo que aparece reflejado en infinidad de películas en los que los contendientes se destrozan a golpes en un ring. La realidad es diferente, muy diferente, y, pese a que quizás es el deporte de contacto que menos reglas tiene, lo cierto es que, como las meigas, «habelas, hainas».

Los practicantes de esta disciplina, aún no muy arraigada en España, aunque aparentemente va creciendo el número de aficionados, disponen de todo un arsenal de golpes con ambos puños, codos, rodillas y piernas, sin olvidar distintas técnicas más propias de otras artes marciales, como pueden ser las proyecciones, los barridos o los agarres. Es algo que conoce bien el teniente Marcos Canosa, adscrito al regimiento Príncipe de la Brilat, quien hace apenas dos semanas volvió a revalidar el título de campeón de España, en este caso en la categoría amateur, al derrotar a un contrincante más experimentado, casi profesional.

Lo curioso es que no es el único militar de la brigada aerotransportable al que le ha prendido el gusanillo del muay thai. Así, en el mismo batallón del teniente Canosa hubo quien llegó a ser profesional de este arte marcial, si bien ya se ha retirado de la competición activa, mientras que en el batallón Zamora también hay algún que otro aficionado a combatir en el ring.

En todo caso, la progresión de Marcos Canosa en este deporte es incuestionable. No en vano, empezó a practicarlo hace algo más de un año después de haber probado suerte, tal y como refiere en el boletín Tierra, en taekuondo o el kickboxing. Frente a estos deportes más conocidos por el gran público, el muay thai es «de los más duros en la forma de pelear. Se puede decir que es el más completo de los de golpeó», señaló en declaraciones a Clara Beni, redactora de esta publicación interna del Ejército de Tierra.

En todo caso, la carrera castrense sigue siendo prioritaria para este militar, que se entrena diariamente entre una y dos horas. No obstante, reconoce que «la disciplina y la dureza de la vida militar» es una de las armas que juegan a su favor a la hora de encarar algunos combates, sobre todo aquellos que tienen lugar al regresar de unas maniobras, donde el cansancio acumulado puede hacer mella en su estado físico.

Pero, ¿qué es el muay thai? El también denominado boxeo tailandés o arte de los ocho miembros surgió de la necesidad que los ciudadanos de este reino asiático tuvieron de defenderse frente a los continuos conflictos bélicos que mantenían, siglos atrás, con otros países vecinos. Con el paso del tiempo, ha derivado en un deporte de contacto que ha ido ganando popularidad en los últimos años. De hecho, se ha implantado un código ético y existe una federación internacional.

En este marco, el haber logrado el campeonato de España le permitirá a Marcos Canosa competir en el próximo Europeo de esta disciplina deportiva. Es una cita en la que no tiene nada que perder y sí mucho que ganar. Acude con la intención de aprender, ya que él mismo reconoce modestamente que es un recién llegado. Así que, tal y como apunta en Tierra, su intención es la de «hacer unas buenas peleas, ya que me voy a encontrar rivales con mucho nivel. Es preferible centrarse en mejorar y coger experiencia antes que obsesionarse con campeonatos y victorias».

Y al mismo tiempo, evitar las lesiones. Aunque a diferencia de lo que pudiera parecer, es más habitual que uno se lesione de gravedad disputando un encuentro de fútbol o un partido de baloncesto que cruzando golpes en un cuadrilátero. Eso sí, moratones y contusiones están a la orden del día, mientras que, si se sigue un entrenamiento adecuado, son menos comunes las roturas o las fracturas que en los llamados deportes de masas. Así lo entiende este oficial de la Brilat, quien, desde que descubrió el mundo de las artes marciales con 18 años, únicamente ha sufrido un percance serio en una rodilla, del que se ha recuperado: «Aparte de eso, únicamente un par de fisuras en las costillas y una rotura de fibras». Nada que el descanso, visita al fisioterapia y un analgésico para el dolor no pudiese resolver y aliviar.

Crónica Un deporte de contacto en expansión