Suso Leiro mira al norte más gélido

Marcos Gago Otero
marcos gago SANXENXO / LA VOZ

PONTEVEDRA

La intención del navegante es emprender su próximo viaje en otoño.
La intención del navegante es emprender su próximo viaje en otoño.

El navegante de Portonovo emulará a Colón hasta el Caribe y remontará el Atlántico hacia Terranova con la meta puesta en el Círculo Polar Ártico

05 jun 2015 . Actualizado a las 05:05 h.

El navegante más internacional de Galicia, Suso Leiro, tiene ya ruta para su próxima aventura en alta mar y en solitario a bordo de su velero Finesse. En esta ocasión su derrota irá de las aguas más cálidas del planeta a las más gélidas, o lo que es lo mismo, de las paradisíacas islas del Caribe, a las que llegará emulando a Colón desde Canarias, a los peligrosos hielos del Círculo Polar Ártico, como los exploradores del siglo XIX.

La ruta está trazada, el plan está en su cabeza, el Finesse está listo, adaptado con un pionero sistema contra la congelación del agua del motor, y ahora solo falta aguardar porque la climatología permita a este navegante hacerse a la mar y a poner rumbo a lo desconocido. «Hai que esperar a cando pasen os ciclóns para navegar polo Atlántico», precisó. Es decir, levará anclas a mediados de noviembre.

Para Suso Leiro, la navegación entre icebergs no es nueva. Ya lo ha hecho en otras ocasiones que ha alcanzado el Ártico. Su último intento por remontar el círculo polar ocurrió en el 2014. Quería circunvalar Europa y Siberia para cruzar al Pacífico por el Estrecho de Bering. De esa expedición guarda un recuerdo agridulce. Llegó a Noruega y cruzó la frontera con Rusia, pero las autoridades eslavas no le dejaron seguir. Tuvo que volverse, con la rabia de aquel que casi toca la meta con la punta de los dedos. El pasado abril lo volvió a probar, para ir a Terranova con escala en las Azores, pero una climatología muy adversa lo forzó a refugiarse en Leixoes (Portugal) y regresar a Portonovo.

Leiro no se rinde. La ruta propuesta es la siguiente: Portonovo, Canarias, Cabo Verde, islas del Caribe, Bermudas y Terranova, tomando como base la posesión francesa de San Pedro y Miquelón para remontar el Atlántico hacia el Círculo Polar Ártico. Es un reto que lo pondrá a prueba, pero precisamente es lo que le atrae más. «Eu non fago rutas sensatas, gústanme as difíciles. Non teño remedio», concluye con una mirada de complicidad y la pasión por los viajes en los ojos.