Rías Baixas mantiene sus buenas cifras de exportación y profesionaliza sus bodegas a través de la acreditación ENAC

L. J. Barral LA VOZ

PONTEVEDRA

Los caldos de esta Denominación de Origen ganan presencia en el mercado europeo y aumentan su facturación en un 3% debido al incremento del precio de litro de vino

02 dic 2014 . Actualizado a las 11:40 h.

La D.O. Rías Baixas ha logrado mantener sus buenas cifras de exportación durante la campaña 2013-2014 gracias a introducir sus vinos en países europeos como Eslovenia, Eslovaquia y Lituania, y gracias asimismo al aumento de ventas en lugares como Irlanda u Holanda (donde las exportaciones se incrementaron en un 40%). Así lo confirmaron esta mañana en rueda de prensa el presidente del Consejo Regulador, Juan Gil; y el secretario general de organismo, Ramón Huidobro; quienes también anunciaron que, aunque la producción no ha aumentado en volumen, sí lo ha hecho en facturación, incrementándose esta en al menos un 3%. "Hemos vendido más de cinco millones de litros de vino en los cinco continentes, aumentando el número de bodegas participantes en los planes de exportación", explicaba Gil.

Además, Huidobro incidió también en la importancia vital que suponen las ventas nacionales para la Denominación, destacando que, a pesar de que el consumo de vino ha caído en el país, Rías Baixas ha conseguido incrementar su facturación gracias al aumento del valor medio de sus caldos. "Se han subido los precios. El valor medio de un D. O. español es de 3'24 euros el litro, mientras que en nuestro caso es de 5'31. Por esto se ha aumentado la facturación aunque no haya habido aumento de volumen de producción", explicaba el secretario general del organismo.

Profesionalización bodegas

El Consejo Regulador de la Denominación de Origen de Rías Baixas acaba de recibir la acreditación de la Entidad Nacional de Certificación (ENAC), lo que se traducirá en una mayor profesionalización de sus bodegas.

Así, el Ógano de Control y Certificación, responsable de garantizar los vinos de esta denominación de origen en todo su proceso, consiguió una certificación que refuerza la fiabilidad y la garantía de los Rías Baixas de cara al consumidor. "Dejamos de ser inspectores y pasamos a ser auditores. Hasta ahora, los viticultores recibían inspecciones, ahora tienen que realizar un autocontrol, estar más atentos. Esto llevará a una profesionalización de las bodegas", concluyó Huidobro.