Las dudas sobre la prórroga de Ence frenan 45 millones para Lourizán

Marcos Gago Otero
marcos gago PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

La actual concesión de Costas finalizará en el 2018 y la factoría confía en lograr una prórroga.
La actual concesión de Costas finalizará en el 2018 y la factoría confía en lograr una prórroga. capotillo< / span>

La pastera dice que la inversión es «imprescindible» para su competitividad

04 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

La inversión necesaria para modernizar la fábrica de Ence en Lourizán y garantizar su futuro asciende a 45 millones de euros, una medida que no se aplicará en obras por ahora pendiente de que se despeje si Costas le renueva o no la concesión. El grupo pastero no quiere renunciar a su complejo industrial en Pontevedra, que es junto con Navia y tras el cierre de Huelva, uno de los dos pilares de su actividad en la producción de celulosas y referente a nivel europeo. Las pérdidas de Ence en los nueve primeros meses de este año -140 millones de euros-, como consecuencia de la reforma energética del Gobierno central y la evolución de los precios de la celulosa, hacen todavía más urgente que se despeje el panorama jurídico de la concesión. Sin embargo, esta circunstancia está lejos de disiparse, porque primero tiene que resolverse el expediente de caducidad incoado por orden judicial. Y ante esta situación, Ence se está volcando en Navia, en detrimento de la fábrica pontevedresa.

La pastera, según indicó ayer, está desplegando un «ambicioso plan de recuperación» basado en la mejora de eficiencia de sus dos factorías y en una «intensa» reducción de gastos. No obstante, estas inversiones están paralizadas en el caso de Lourizán por el citado importe de 45 millones de euros, «a la espera de que se despeje la actual incertidumbre sobre la renovación de la concesión de la fábrica».

En su balance de lo que va de año, el grupo energético sostiene que estas inversiones, por ahora en el aire en Pontevedra, «son imprescindibles para poder reducir sus costes de producción y evitar su cierre». El mercado internacional de la celulosa, al que se destina la mayor parte de la producción pontevedresa, está inmerso en una dura competencia por los fuertes incrementos de la capacidad de producción de Latinoamérica y a unos precios muy competitivos.

Como contraste al parón inversor en Pontevedra, en el primer semestre de este año Ence avanzó, «de manera acelerada», en la ejecución de los trabajos de mejora en Navia. El complejo asturiano recibió 12 millones de euros para adecuar su eficiencia a las exigencias del mercado, lo que además generará ahorros anuales al grupo pastero de 10,2 millones de euros. Igualmente, se han contratado inversiones en Navia por otros 45 millones de euros y que se llevarán a cabo a lo largo del próximo año.

A pesar del impacto negativo en sus cuentas de la reforma energética estatal, Ence mantiene una «sólida situación financiera», con una fuerte posición de liquidez, que alcanza los 199 millones de euros, y sin vencimiento de deuda significativos hasta el 2020. Esta medida asegura el mantenimiento de su capacidad de inversión.