Ordenan investigar por obstrucción a la Justicia a un abogado que no fue a un juicio

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

Malestar entre los letrados al considerar la medida excesiva e irrespetuosa

22 oct 2014 . Actualizado a las 13:02 h.

Lo que prometía ser un juicio por narcotráfico contra tres acusados de intentar introducir 472 kilos de cocaína por el puerto de Marín terminó con la Audiencia suspendiendo la vista oral y ordenando la deducción de testimonio por un posible delito de obstrucción a la Justicia contra uno de los letrados de la defensa. El motivo fue que el abogado, el que fuera primer alcalde de la democracia de Cangas, José Chapela, no se presentó a la vista oral y remitió, a través de su cliente, un documento informando que se encuentra de baja.

Esta circunstancia propició que el fiscal solicitase lo que a la postre significará que se abran diligencias contra el abogado. Explicó que la semana pasada presentó unos informes médicos solicitando un aplazamiento, pero tales documentos «no reflejan que tenga una patología que haga necesaria la suspensión y el secretario judicial dicta un decreto en el que deniega» la petición.

El representante del ministerio público estimó que la presentación del parte de baja, «que es de fecha posterior a la denegación de la suspensión», fue «algo intempestivo, porque no lo preavisa a la sala». «Entendemos que es una maniobra dilatoria en una causa con preso. La gravedad está en que tuvo tiempo para manifestarlo a la sala y, en caso de que fuera verdad que tenía esa patología y que no podía celebrar el juicio, tenía que haber concedido la venia a alguien. No nos creemos que esté enfermo», añadió.

El fiscal incidió en que se trata de una causa judicial compleja, con catorce tomos y videoconferencias con Portugal, y en la que uno de los tres acusados se encuentra en prisión preventiva, medida que finaliza en mayo del 2015. Asimismo, recordó que, antes del verano, la Audiencia ya desestimó las cuestiones previas de las defensas, entre ellas la planteada por el propio José Chapela argumentando que la Audiencia carecía de competencia para juzgar este asunto tras la reforma de la justicia universal.

El fiscal instó a la Audiencia a que, en el caso de que no se considerara delictiva la conducta del letrado, diese cuenta de lo ocurrido al Colegio de Abogados para que actúe en consecuencia.

Recaída y hospitalización

También aludieron al Colegio de Abogados de Pontevedra los compañeros de Chapela consultados por La Voz, quienes exigieron un pronunciamiento contundente ante una decisión que consideran fuera de lugar, excesiva, rigurosa e irrespetuosa con la labor profesional que a lo largo de las últimas cuatro décadas ha desarrollado este conocido letrado.

«Casi cuatro años de instrucción sin que se preocuparan lo más mínimo por los presos provisionales, ahora van a poner el grito en el cielo por un mes», apuntó un compañero de José Chapela. Tras dejar claro que el abogado cangués trasladó personalmente al tribunal que no está en condiciones de seguir en el procedimiento, rechazaron de plano las insinuaciones del fiscal: «¿Un señor de 70 años necesita una táctica dilatoria de un mes para una instrucción que lleva cuatro años parada en Ponteareas?».

El propio abogado, en declaraciones a la delegación de Vigo, precisó que hace un mes tuvo una recaída que le llevó al hospital y por la que sigue un tratamiento médico en casa, por lo que solo acude a las vistas para cerrar conformidades. «En mi carrera soporté cuatrocientas suspensiones de juicios y jamás hice ni una sola observación», remarcó.

Una vez se designe a su sustituto, la Audiencia Provincial de Pontevedra fijará una nueva fecha para celebrar un juicio en el que uno de los tres acusados, el único que permanece en prisión y que es de origen colombiano, ya anunció ayer que había llegado a un acuerdo con el ministerio público.