Veinte de las interrupciones fueron por malformaciones fetales
25 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Mujeres con pareja estable, con edades de 30 a 40 años y que incluso han tenido algún otro embarazo. Este es el perfil mayoritario entre las cuatrocientas solicitudes que el pasado año recibió el Chop para interrupciones voluntarias del embarazo por debajo de las catorce semanas, el plazo que permite ahora mismo la actual normativa para abortar libremente.
En el año 2009 se comenzaron a realizar abortos en el Complejo Hospitalario de Pontevedra. Primero, sujetos a la ley de supuestos de 1985 y, desde hace tres años, a la de plazos. En todo este tiempo, según apuntó ayer el jefe del Servizo de Xinecoloxía del Chop, Eloy Moral, la demanda ha sido creciente hasta el año 2013, en que se registró un descenso del 5 % en las solicitudes presentadas por mujeres que estaban embarazadas de menos de catorce semanas. Aún así, fueron cuatrocientas las citadas peticiones, mientras que en otros veinte casos se practicaron interrupciones del embarazo por causa eugenésica, es decir, por problemas de malformación del feto.
Moral subrayó que estas intervenciones «atendieron a una realidad social» y se refirió a la «notoria» polémica que ha generado la reforma legislativa que prevé Gallardón y que «incluye cambios importantes». «Si es como el anteproyecto dice, va a cambiar mucho la cosa», manifestó el ginecólogo, que reconoció no tener problemas de objeción de conciencia, «pero tengo que ajustarme a lo que la legislación dice».
El jefe del servicio también cree que ese descenso del pasado año puede tener que ver «con los esfuerzos realizados en información, sobre todo a nivel de gente joven».
Añadió que para las interrupciones en mujeres embarazadas por debajo de las nueve semanas de gestación se ofreció tratamiento ambulatorio en el Centro de Orientación Familiar, y en el caso de las que estaban entre 9 y 12 semanas se derivaron a centros concertados «pero fueron un pequeño numero de pacientes». «Independientemente del punto de vista personal -añadió el jefe del servicio-, yo tengo un cometido que es poner en marcha un trabajo para una ley pendiente de salir».