La constructora de Nino Mirón entra en la fase de liquidación

Nieves D. Amil
nieves d. amil PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Nino Mirón, en una junta de accionistas cuando era presidente del Pontevedra.
Nino Mirón, en una junta de accionistas cuando era presidente del Pontevedra. joel martínez< / span>

La venta de los activos podría alcanzar los dos millones de euros

14 ene 2014 . Actualizado a las 13:48 h.

La liquidación de Xiabre, la división constructora del Grupo Nino Mirón, es el último eslabón de una cadena empresarial que se diluyó en manos de la crisis. El Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme) publicó ayer la entrada en fase de liquidación de la empresa, lo que supone la venta de todos sus activos.

El valor de los bienes podría alcanzar un máximo de dos millones de euros y son en su gran mayoría maquinaria y vehículos, según informan desde Gestiona Galicia, gestora encargada de administrar la propiedades de Nino Mirón. El dinero obtenido de la venta de activos irá destinado a los pagos pendientes con los 15 trabajadores que tenía la firma y que se calcula que percibirán una media de 40.000 euros cada uno.

El pasado 25 de septiembre, se vio obligado a solicitar el concurso de acreedores voluntario para Xiabre en el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra. Ahora, este procedimiento se resuelve con la liquidación de todos sus bienes y deja al grupo de Nino Mirón en el peor de los escenarios posibles.

El pasado noviembre, la inmobiliaria, matriz del grupo empresarial, entraba también en un proceso concursal al acumular un pasivo de 30 millones de euros.

Treinta años de vida

La empresa de Nino Mirón fue creada en 1984 para la gestión de suelos, promoción, construcción y venta de viviendas. Desde su nacimiento hasta la llegada de la crisis, el grupo creció al amparo del bum inmobiliario. A sus espaldas quedan más de cuatro mil viviendas, de las que más de mil fueron de promoción propia, según datos de la propia firma.

Algunas de las últimas operaciones de la compañía pusieron en jaque la viabilidad empresarial. La compra de unos terrenos en Sanxenxo, que permanecen todavía sin edificar, y la adquisición de unos terrenos en Poio para levantar las viviendas de lujo Pazo Besada, de las que muchas están sin vender o inacabadas, fueron las últimas actuaciones. Con la empresa matriz y todas sus filiales en estado crítico, Nino Mirón depositó toda su confianza en Gestiona Galicia, quien trabaja en un plan de viabilidad para intentar salvar la matriz inmobiliaria. Según sus gestores, «posee activos de buena calidad», que podrían cubrir una deuda de cerca de 30 millones. Mirón no quiso hacer ayer ninguna valoración sobre la situación económica y profesional que atraviesa y solo indicó brevemente que «la idea es reflotar la inmobiliaria, se está haciendo un plan de viabilidad», a pesar de las dificultades actuales.