La primera escuela profesional de banda diseñada e ilustración de Galicia inició su segundo curso triplicando el numero de alumnos
14 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La primera escuela profesional de banda diseñada e ilustración de Galicia, O Garaxe Hermético, inició ayer su segundo curso triplicando el numero de alumnos y consolidando en poco tiempo un proyecto académico cuyo objetivo es formar profesionales que puedan publicar sus trabajos, que es «o que realmente importa, non o título», como dice Kiko da Silva. El dibujante e ilustrador, colaborador de La Voz de Galicia, ha puesto todo su esfuerzo y empeño en este centro, convertido ya en un referente nacional como alternativa a otras escuelas de Madrid y Barcelona, que hasta ahora eran la única opción formativa.
Hasta 36 alumnos de las más diversas procedencias -Asturias, Portugal, A Coruña, Vigo, Tui, Ourense o Santiago- han apostado por O Garaxe, atraídos por una metodología pensada para convertirles en profesionales del cómic y la ilustración. Y sabedores, además, de que todos los profesores que les dan clase -el propio Kiko, Fernando Iglesias Kohel, Fran Bueno y Miguel Porto- son creadores en activo de BD y viven de ello. Da Silva se muestra, en todo caso, prudente sobre la consolidación de este proyecto académico. «Aínda queda moito curro por facer». Explica que este curso será más intensivo para conseguir más rápidos resultados. De aquí a mayo cada alumno producirá cerca de cuarenta páginas de banda diseñada y tendrán contacto directo en master classes con editores.
Vocación de dibujante
Antes, para dedicarse al cómic había que ser autodidacta. Esta profesión no se imparte en las universidades, que aún consideran la BD un arte menor. Y escuelas privadas como O Garaxe han despertado vocaciones estancadas. Alfonso Barreiro (Noia) trabajó 5 años como ingeniero naval en Ferrol «hasta que este maravilloso gobierno me echó al paro», dice. Es un apasionado del cómic desde niño y la escuela de Kiko da Silva le ha dado la oportunidad de dedicarse a él como dibujante. Para Álvaro Barrientos, otro de los alumnos, O Garaxe cubrió las expectativas creativas que no encontró en el bachillerato artístico. Sara Martínez, Nuria Rodríguez y Guillermo Mayo también encontraron en esta escuela lo que no les ofreció la Facultad de Bellas Artes. Ángel Verísimo decidió compaginar la pintura con la ilustración. Y Pedro Nuno, de nacionalidad portuguesa, ejerció diez años como arquitecto y decidió matricularse en O Garaxe Hermético después de asistir el pasado año a un seminario que impartió el artista Miguel Anxo Prado.