Once estudiantes de la Escola de Pontevedra han realizado prácticas
29 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.En pleno debate sobre el futuro de la Escola Superior de Conservación e Restauración de Bens Culturais de Galicia, con sede en Pontevedra, sus alumnos completan su formación con prácticas en museos de Europa y América. El centro, que pelea desde hace más de un año por conseguir su adscripción a la Universidad para que sus estudios obtengan el título de grado, trata de fomentar la actividad extraescolar de los estudiantes mediante una serie de actividades formativas fuera de la Escola. Comprenden prácticas en museos, campañas de verano y prácticas en empresas.
El centro tiene convenios con numerosos museos nacionales e intenacionales para realizar prácticas, que suelen tener una duración de tres meses. Este año han participado un total de doce alumnos. Tres estudiantes han intervenido en la campaña de restauración de murales prehispánicos en la ciudad maya de Calakmul (México); dos han realizado prácticas en el Museo Tumbas Reales de Sipán (Perú); dos en el Museo Arqueológico Nacional (Madrid); una en el Museo Nacional de El Prado (Madrid); una en el Museo Nacional de Antropología (Madrid); y dos en el Museo Etnográfico Luigi Pigorini (Roma).
La relación se completa con una alumna en prácticas en Guinea Ecuatorial, donde se sumó a un proyecto del CSIC titulado Estrategias de gestión del patrimonio arqueológico en África Subsahariana: Tanzania y Guinea Ecuatorial.
Junto a las prácticas en museos, la Escola también proyecta y organiza campañas de verano en las que participa el profesorado y el alumnado y que se financian con dinero público. El objetivo de estas actuaciones es acercar al estudiante a la realidad del trabajo profesional. En este 2013 están en marcha dos iniciativas. Cuatro estudiantes en el proyecto de conservación-restauración de la necrópolis de San Vítor de Barxacova, en cooperación con el Ayuntamiento de Parada de Sil (Ourense); y otros cuatro en el proyecto de conservación de los grabados rupestres de A Cabeciña, en Mougás, en Oia (Pontevedra).
Para el año que viene, la Escola ya prepara otras dos intervenciones. Son la restauración del retablo de San José, en la iglesia de Santa María de Oia, y la restauración de tres esculturas romanas del yacimiento de Torreparedones, en Baena (Córdoba).
Otra de las actividades extraescolares son las prácticas en empresas, una modalidad más reciente y que es obligatoria con la implantación del grado. Participan seis alumnos en la firma Techné, en proyectos de restauración de retablos en Porto do Son (A Coruña), durante un mes; y otros tres con la empresa Ara Restauración, en el proyecto de restauración del Vía Crucis del santuario de As Ermidas (O Bolo), también durante un mes.
La Escola pontevedresa también gestiona la participación (individual) en otras campañas de trabajo, especialmente arqueológicas, en diversos puntos de España y el extranjero.