La asamblea entre los trabajadores acuerda que habrá huelga si la empresa no retira los reajustes de personal
27 feb 2013 . Actualizado a las 21:03 h.Los trabajadores de Ence celebraron ayer dos asambleas, una matinal y otra de tarde. En las dos citas se dio el mismo resultado. Los representantes sindicales de la factoría de Lourizán tienen carta blanca para aprobar, en el seno del comité intercentros de la pastera, cualquier medida de movilización o presión que estimen oportuna. La plantilla secundará sus movilizaciones y estas se dan por seguras si la firma no retira de su plan de reajustes los 144 despidos dentro del grupo que comunicó sorpresivamente al comité la semana pasada.
Carácter informativo
Las reuniones de ayer tuvieron solo carácter informativo. No se votó ninguna propuesta concreta en el complejo de Lourizán. Los sufragios internos sí que tuvieron lugar en la fábrica de Navia y allí 223 trabajadores revalidaron la petición de sus dirigentes sindicales de rechazar la propuesta de la empresa y adoptar los acuerdos que entendiesen oportunos. En Navia se llegó a hablar, según la versión de los sindicatos, incluso de una huelga indefinida.
En relación con las opiniones pulsadas en las asambleas de Pontevedra, Jesús Graña, presidente del comité de empresa de la factoría de Lourizán, manifestó que el apoyo de los trabajadores había sido abrumador. Y también son conscientes de que sus reivindicaciones requerirán de un esfuerzo importante. «Unha pitada non vai servir de nada, creo que haberá que ir por unhas medidas máis drásticas que será unha folga». El objetivo está claro. Para el portavoz de los afectados se trata de «frenar o despropósito da empresa».
Ence mantiene su intención esta semana de reunirse en Madrid con el comité de empresa. En esa reunión será más concreta la cifra propuesta de despidos en cada uno de los cuatro centros de trabajo del grupo, entre fábricas y oficinas centrales. A día de ayer, los sindicatos todavía desconocían cuántos trabajadores se podrían ver afectados por los despidos en Pontevedra.
Por su parte, la APDR criticó el paso de dos años desde que interpuso una queja a los responsables del Consejo para la Gestión Forestal (FSC) ante la concesión, por parte de Bureau Veritas, de la certificación de cumplimiento de los estándares ambientales y de calidad para la filial de Ence, Norfor. La APDR criticó que no hubiese recibido respuesta y cuestionó las condiciones de la certificación.