Educando a escolares ciegos frente a los riesgos de Internet

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

RAMON LEIRO

Un guardia civil explicó a niños de la ONCE los peligros de las redes sociales

05 sep 2012 . Actualizado a las 06:58 h.

Estafas, tráfico ilícito de datos bancarios, corrupción de menores, pornografía infantil, amenazas y coacciones, virus, troyanos... Internet es, en ocasiones, un caldo de cultivo de este tipo de conductas delictivas a las que está expuesto cualquier usuario. Se trata de un riesgo que se incrementa exponencialmente si este es invidente.

Conscientes de que las personas con discapacidad visual «estamos más expuestos», un guardia civil de la brigada de delitos telemáticos de la Guardia Civil ofreció ayer toda su experiencia a los niños inscritos en los cursos de verano del Centro de Recursos Educativos de la ONCE.

El director de la institución, José Ángel Abraldes, precisó que el mayor problema al que se enfrentan los internautas ciegos estriba en que es más fácil que «nos perdamos algún tipo de información que nos puede estar dando alertas». Es por ello que abogó por lograr que los internautas más jóvenes reciban «un plus de información» preventiva para que sus incursiones en la red de redes no se transformen en una pesadilla.

Explicó que tanto los niños con esta discapacidad como los que no la tienen reciben la misma información cuando acceden a una web o a una red social. «Lo que pasa es que a la hora de operar con el ordenador sí que existen diferencias», algo que se acrecienta cuando uno comprueba la poca accesibilidad de muchos de estos entornos.

A la postre, estas diferencias derivan en que «no eres tan sensible a los riesgos», de tal modo que «no nos paramos tanto» a comprobar los potenciales peligros existentes al navegar.

Para paliar este déficit, el especialista del instituto armado les trasladó las precauciones que cualquiera debe adoptar cuando accede a Internet. Fue una comparecencia cuanto menos curiosa, ya que el agente era la primera vez que se enfrentaba a una audiencia con discapacidad visual. Para solventar los potenciales problemas de comunicación, docentes del centro de la ONCE «fueron adaptando algunos de los contenidos que el guardia civil expresaba a la realidad de nuestro colectivo».

Por cierto, y en el marco de esta realidad, José Ángel Abraldes reconoció que el tópico de que un ciego tiene una especial sensibilidad para la música está muy cercano a la verdad. No es de extrañar, por tanto, que posteriormente los niños pudiesen conocer y tocar los instrumentos del lutier Dionisio Aboal.