1Frente a quienes no le auguran un buen futuro, el papel se reivindica como claro objeto artístico en la exposición que Clara Salamanca y Ana Ferrer exhiben estos días en la sala de la Escola de Restauración. El paso del tiempo es también una de las temáticas que ambas creadores abordan en Tic tac Papel, que reúne medio centenar de obras realizadas sobre este material y que pontevedreses y visitantes pueden ver hasta el próximo 8 de febrero. Como dicen, la muestra «parte da fascinación que ambas sentimos polo papel, xa sexa como soporte ou como protagonista da obra», destaca Clara. «Empregamos este material de todas as maneiras posibles -añade- para expresar e deixar ver unha temática que relaciona todas as nosas obras: o tempo como instante detido, como distancia, como futuro ou como recordo... E de esta relación entre tempo e material empregado aparece o título da exposición». En casi todas las piezas utilizan técnica mixta (colaje, dibujo o impresiones).
Clara es graduada en Bellas Artes por la Universidad de Vigo y Ana está finalizando la carrera, y ambas comparten un taller en la zona vieja. Habían participado con anterioridad en otras muestras colectivas, pero esta es la primera vez que pueden mostrar de forma tan amplia su trabajo. Si tienen que elegir, Ana se queda con la pieza Constancia, distancia y nitidez, en la que refleja el deterioro de los recuerdos a través del tiempo, «unha distorsión que leva a erros e a sentirse ás veces perdido, facéndote dudar de ti mesmo e do teu futuro». Salamanca se queda con Salón de espaldas, que realizó en un formato más grande al que habitualmente utiliza. La muestra puede visitarse de lunes a viernes de 18.30 a 20.30 horas.
«Revival» del vinilo
2El paso del tiempo ha empezado a devolver el protagonismo al vinilo, desaparecido prácticamente del mercado en los 90, pero que vuelve a resurgir con fuerza hasta el punto de que, por ejemplo, grupos como Coldplay o Metallica apuestan de nuevo por el formato. Eloy Delgado, conocido en su faceta de dj como Eloy Starlux (fue pincha residente en la citada sala) es un fanático del vinilo. Su colección propia alcanza los 1.200 discos y desde hace unas semanas subraya que se ha convertido en el único dj en Pontevedra que trabaja con vinilos en el pub Pasarela, donde está todos los viernes a partir de las doce de la noche. «Ya tenía mi colección en los años 80, y en los 90 dejé de comprarlos al empezar los cedés. Pero en los últimos cinco años he vuelto a ellos -explica-, por una comparación que hice un día en casa. Cogí el Led Zeppelin II, lo volví a probar en vinilo y vi que me gustaba más que el compacto. Y volví a comprar. Ahora hay sellos que vuelven a editar de nuevo en vinilos, que son más duros que antes, y las marcas han vuelto incluso a fabricar platos, con entrada USB para que puedas grabar en digital».
Afirma que pinchar con vinilos es «más complicado, porque tienes que estar más atento a la hora de ver cuánto te queda de cada tema y también pendiente de las revoluciones, es quizás una forma de pinchar más artesana». Pero no tiene dudas en que en estos momentos prefiere el sonido procedente del gran formato. «El sonido es algo impresionante -indica-. Tiene mucho cuerpo, más graves y es como que lleva más peso. Es más contundente, en definitiva». La música de los 80, especialmente el pop británico, es lo que más le gusta pinchar en sus sesiones, además de funky. De la música actual, opta por el indie.