Hifas da Terra aplica la micología a la biomedicina

Nieves D. Amil
Nieves d. amil PONTEVEDRA/ LA VOZ

PONTEVEDRA

La empresa pontevedresa sortea la crisis exportando una producción basada en la investigación del cultivo de setas

07 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Pontevedra exporta cultura micológica a media Europa de la mano de una empresa que ha sabido explotar el cultivo de las setas como algo más que su faceta alimenticia. Hifas da Terra ha dado el salto en su primera década de vida del cultivo de setas a la aplicación de la biotecnología en un sector poco explorado hasta ese momento. La clave, apostar todo en I+D. «Podemos decir que el presupuesto es eso, la reinversión total», señalan en la compañía.

La investigación copa el 80% del personal y del presupuesto. Tras años recopilando estudios científicos y con muchos congresos de medicina a sus espaldas, han acabado por obtener extractos medicinales de las setas y los concentran en principios activos que se distribuyen en cápsulas. En sus laboratorios sacan la esencia de especies como la Reishi, Shiitake o la cola de pavo y las exportan a todo el mundo.

La apuesta por la internacionalización y la comercialización les ha llevado a pasar de largo por la crisis y posicionarse en países como Italia, Francia, Nueva Zelanda, Australia, Portugal o Dubai y próximamente desembarcarán en Grecia y Sudamérica. «Solo hay dos o tres empresas en el mundo que concentren así los principios activos», indican.

La delgada línea que separa la medicina de las productos naturales les hace caminar con cautela, aunque a su favor juegan las voces de un sector de la Medicina que defiende estos tratamientos como un complemento a la quimioterapia que contribuye a mejorar la calidad de vida del enfermo.

El esfuerzo innovador de Hifas da Terra se debe en parte a su gerente Catalina Fernández de Ana, que recién licenciada en Biología apostó por un mundo que en 1997 todavía estaba por explotar. Paso a paso ha ido convirtiendo la casa familiar de Bora en una empresa cuyo objetivo principal es la innovación. Ahora trabaja con una veintena de personas y esperan que el próximo año la facturación alcance el 1,8 millones de euros. Hace apenas dos meses han abierto un centro de interpretación de la seta en sus instalaciones.

Setas en árboles

Hifas da Terra es pionera en la microrrización, una técnica para inducir a los árboles adultos a producir setas silvestres en épocas con climatología adversa. Los hongos buscan siempre unas temperaturas en torno a los 20 grados y una humedad alta para desarrollarse. «El microrrizado en el castaño hace que se filtren mejor en el tronco y crezcan más rápido, mejor y den un producto más grande», explica una de los responsables, quien detalla que para lograr que los castaños produzcan setas se les introduce una especie de gel llamado micelio que potencia su aparición. «Alcanzamos el 20% del peso del tronco en setas», indica, para demostrar que esta nueva línea de negocio está abriéndose con fuerza. Un laboratorio se dedica de lleno al extracto de setas y microrrizado, mientras el otro centra su actividad en el cultivo.

En su historia solo han tenido un golpe casi mortal, que les obligó a empezar prácticamente de cero. Los incendios del 2006 asolaron la masa forestal en la que trabajan y hubo que reconstruir todo. Ahora con una hectárea de terreno junto a la empresa y dos más en los alrededores de Bora estudian ampliar siete más. «La parte forestal necesita expandirse», aseguran durante un paseo por los invernaderos donde cultivan las setas para contribuir a «acerca la micología a la gente con productos 100% naturales».