La recepción de la obra atrasa la unidad de reproducción del CHUS

j. gómez SANTIAGO / LA VOZ

PONTEVEDRA

El cambio de unas puertas mantiene a 350 parejas en lista de espera

01 ago 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La unidad de reproducción asistida del hospital público de Santiago, CHUS, tenía que haber entrado en servicio en el último trimestre del 2010, pero las obras todavía no se han recibido por parte de la Administración, al parecer porque faltan pequeños detalles, como el cambio de las puertas y algún otro imprevisto. Unas 350 parejas de las zona de Santiago y Barbanza, con todas las consultas ya realizadas, están en la primera lista de espera.

El jefe de esa unidad y de obstetricia del Clínico, Manuel Macía, admite el retraso como un inconveniente, pero justifica que pueda darse en una obra muy compleja por los requisitos que exige. «Llamamos a principios de año a familias de las zonas de Santiago y Barbanza que estaban en lista de espera en A Coruña y se hicieron consultas con normalidad, para adelantarles el tratamiento. Contábamos con empezarlos en junio, pero no queda otro remedio, porque las obras aún están sin recibir y hay detalles del equipamiento pendientes de solución», explica.

En cuanto a la parte física, lo más difícil ya está hecho: hay dos consultas, instalaciones para transferencia de embriones, aspiradora de ovocitos, laboratorio para tratamiento de semen, equipos para trabajo con embriones, mesa antivibraciones, transporte de ovocitos, cámaras de incubación de embriones y de crioconservación: «Por nuestra parte está todo listo -insiste Macía-. Faltan detalles, como cambiar unas puertas y solucionar algún imprevisto». En las obras y equipamiento se han invertido unos 600.000 euros.

Además, la unidad ya tiene asignados un ginecólogo, un biólogo-embriólogo, y personal de enfermería: «Se han adelantado las vacaciones para que, tan pronto se pueda, funcionar ya», sostiene el jefe del servicio. Eso sí, cuando esté a pleno funcionamiento «se precisará el doble de profesionales».

Este ginecólogo entiende la «ansiedad» de algunas familias, «pero el retraso será de unos dos meses, y no superará el que tendrían de mantenerse en espera en A Coruña».

Desde principios de año, unas 350 parejas han sido evaluadas, y parte de ellas han presentado reclamaciones por la demora en iniciar los tratamientos. La próxima semana está previsto que se reciban las obras del que será el tercer dispositivo público para reproducción asistida de la sanidad pública gallega. De ser así, este agosto podrían comenzar a llamar a unas 50 familias para inseminación artificial. Para otras técnicas deberán esperar a que reanuden su actividad los quirófanos.