El fiscal no descarta retirar los cargos que pesan sobre la mujer del abogado Franco Argibay

L. P. Pontevedra / La VOZ

PONTEVEDRA

29 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Augusto Santaló, fiscal en la vista oral que dirime la operación Cormorán, reconoció que tras escuchar el testimonio de Natividad Laborde, esposa del abogado fugado Manuel Franco Argibay, no descartaba desechar los cargos. Así, asumió que «as operacións as facía todas Franco e pode ser un deses escasos supostos nos que, ao millor, o fiscal retira a acusación».

Minutos antes, la encausada aseguró que desconocía que existiesen en una sucursal bancaria de Valença do Minho (Portugal) una serie de cuentas en las que se realizaron operaciones con importantes cantidades de dinero a nombre de dos de los hijos del matrimonio.

En relación con estas pruebas, si la investigación policial sacó a la luz otras cuentas de las que eran titulares Manuel Franco y su esposa, esta última, al igual que mantuvo durante la instrucción judicial, que no es su firma la que aparece en los documentos de apertura de las cuentas.

Se da la circunstancia de que su abogado solicitó en varias ocasiones una prueba caligráfica de las rúbricas, pero esta petición fue siempre denegada.

En cuanto a las propiedades que figuran a nombre de Natividad Laborde, esta subrayó que todas ellas fueron «regalos de mi marido».

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