«Los ingenieros diseñaron un programa a la carta, que hace todo lo que le pedía la Guardia Civil»
PONTEVEDRA
«Es una magnífica herramienta». Con apenas cuatro palabras, Luis María Uriarte Valiente, de 43 años y fiscal de delitos telemáticos para la provincia de Pontevedra, valoró muy positivamente lo que ha supuesto la aparición del Vicus en la lucha contra el delito.
-¿Cuál es la importancia de esta plataforma informática?
-Podemos poner de relieve su importancia en dos aspectos. Por un lado, lo que supone la coordinación y colaboración entre Guardia Civil y Universidade de Vigo. Es un ejemplo de colaboración entre dos organismos en la persecución del delito, lo que no deja de ser muy interesante. Por otra parte, el resultado. La herramienta que han hecho es una maravilla. Lo que los ingenieros han hecho ha sido conseguir un programa que hiciera todo lo que le pedía la Guardia Civil. Esta hecha, un poco, a la carta y cumple todas las exigencias que se suponía eran las idóneas para perseguir este tipo de delitos.
-Además una de las críticas que se había hecho a su antecesor, el «Hispalis», era que se podía imputar a gente que se bajaba accidentalmente un archivo pedófilo. ¿Todo esto se ha solventado?
-Bueno, tampoco era frecuente que pasara eso. El Hispalis no discriminaba, desde luego, pero se solventaba porque se solían utilizar filtros humanos. Así, hasta que no detectaba que uno estaba intercambiando cinco o seis archivos... Por ejemplo, en la operación Santiago -investigación que se saldó en el 2007 con casi medio centenar de arrestos- se puso el límite en cinco archivos. A todo el que estuviera por debajo no se le perseguía, mientras que quien está distribuyendo más de cinco archivos... Es difícil que sea por error. El Vicus ahora lo hace automáticamente y eso ya es toda una ventaja.
-Hablando del «Vicus» y la puesta de largo que supuso la operación Telémaco. ¿Cómo esta el procedimiento judicial abierto?
-Por la forma de investigación de este tipo de delitos, suele haber un montón de imputados que no tienen relación o conexión entre sí. Esto provoca que el juzgado que ha investigado tenga que inhibirse a otros para que abran una investigación propia. Esto es lo que ha pasado con Cangas, que se ha empezado a mandar y nosotros perdemos la pista a cómo va la instrucción.
-El tema de su conferencia en el Colegio de Abogados es la cibercriminalidad, ¿hay mucha preocupación?
-Sí. Creo que sí, sobre todo en la calle. Cuestiones como las redes sociales, los robos de datos, la pornografía infantil, las estafas... Creo que, en general, la gente mira a Internet con preocupación.
-¿Y es realista tal preocupación o simplemente hay que poner un poco de nuestra parte para quitarnos de muchos problemas?
-Claro, pero para poner un poco de tu parte tienes que tener esa preocupación. Internet es como la calle. Hay peligros en la calle pero no dejas de salir a ella. Hay que adoptar medidas con Internet.
-¿Cuales serían unas medidas básicas de precaución?
-En general, para adultos, un antivirus actualizado y bueno, y no de estos gratuitos. Y para niños, control, que los padres los controlen, que no los dejen solos en la habitación y educación. Los padres tienen que aprender un poquito de esto, que enseñen a los niños. Nos tenemos que acostumbrar a esto, que es nuevo.