Hace veinte años que la ciudad de Oporto acoge uno de los eventos culturales más importantes de Europa, Serralves em Festa . Se espera que cerca de cien mil personas conquisten la ciudad lusa para disfrutar de 40 horas «no stop» de conciertos, conferencias, exposiciones y actuaciones en directo este fin de semana. Pero este año guardarán una sorpresa única con sabor a la Galicia más moderna. Mientras miles de pontevedreses se agolpan hoy en las carreteras a las playas, un grupo de jóvenes del tercer ciclo de Bellas Artes debutan en la apertura del festival con una performance basada en la investigación social y aliñada con la teoría del absurdo. «La más importante de la historia es la guerra de almohadas», explica la directora del proyecto, María Marco , mientras organiza a sus compañeros para desplazarse hasta la capital del Duero.
Antes de partir rumbo a Oporto, los veinte jóvenes de entre 25 y 30 años que forman el colectivo LIBA (Laboratorio de Investigación en Bellas Artes) reconocían estar un poco nerviosos. «Nunca hemos actuado ante tanta gente y sí estamos nerviosos», explica Marco . Y es que con tres pases al día, este grupo de posgrado quiere que el arte cobre una forma más popular e interactúe con la ciudad. La Plaza das Batallas de Oporto será testigo hoy de la apertura del festival y de tres pases más a lo largo de todo el día. El primero en la zona Baixa do Porto y las actuaciones vespertinas se celebrarán en el jardín de Serralves.
Son jóvenes pero no quieren ver pasar desde sus pupitres de doctorado la vida artística de Pontevedra. Se han reunido un grupo de veinte para conquistar el mundo del arte y la cultura con sus espectáculos. «No lo hacemos para ganar dinero sino para disfrutar», señala María Marco . Solo uno de los 70 proyectos presentados para abrir el Serralves en Festa conquistó al jurado. LIBA serán los únicos representantes gallegos y españoles en el evento cultural más relevante del Noroeste. Movimientos rápidos y dispersiones aún más. La metodología que siguen este grupo de pontevedreses se esconde detrás de la filosofía flashmob , encuentros de multitudes que se comunican utilizando medios telemáticos como los mensajes a móviles o los emails. Realizan acciones muy rápidas seguidas de una dispersión no menos rápida, que esperan guste al público luso. «Pretendemos que sea una masa que se mueve dentro de otra masa», explica de manera mucho más divulgativa.
Cree que estas acciones sociales están cada vez más cerca de los jóvenes, al estar vinculados al juego, la sorpresa, la eficacia y el poder de los medios. La performance que hoy impactará al arte luso es una pieza de 40 minutos, vinculada al Dadaísmo, la escultura social de Joseph Beuys, el Pop Art de Andy Warhol, la mímica, el teatro de calle y las nuevas redes. Todo por menos de dos mil euros. «Apenas nos da para el alojamiento, pero siempre vale la pena hacer lo que te gusta», explica Marco . De Oporto pasarán a certámenes en Gijón y de ahí a Santiago. El absurdo social conquista el mundo.