Ingresa en prisión por el robo a una gasolinera de Vilaboa

PONTEVEDRA

09 mar 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El pasado miércoles, sobre la una de la tarde, agentes de la Guardia Civil de Pontevedra procedieron a la detención de un vecino de etnia gitana de O Vao, en el Concello de Poio, por su presunta implicación en el robo de un turismo en grado de tentativa ocurrido el 17 de febrero en este municipio pontevedrés. Fue solo la punta del iceberg.

Ayer, con el trasfondo de los llantos que proferían varios familiares en plena calle, este veinteañero compareció en el juzgado de guardia de Pontevedra, dependencias que abandonó esposado y acompañado por dos funcionarios del instituto armado en dirección al centro penitenciario de A Lama.

Y es que, tras su arresto, los investigadores comenzaron a tirar del hilo y las pesquisas pronto dieron sus frutos descubriendo toda una serie de robos y hurtos en los que, aparentemente, A.J.S. está implicado de una u otra manera. La retahíla de cargo se remontan al mismo día del robo del coche en Poio, jornada en la que supuestamente protagonizó un robo en una gasolinera de Vilaboa. Al parecer, todo apunta a que el ladrón esgrimió un arma blanca para intimidar al personal del área de servicio y hacerse con el botín.

Todo parece apuntar a que, a pesar de este éxito, no se dio ni mucho menos por satisfecho. Ese mismo día, la Guardia Civil lo situó en Meaño, donde habría hurtado un bolso en el interior de un bar; en Pontevedra, con la sustracción de un turismo modelo Ford Scort, así como con el intento de robo de un segundo automóvil, en este caso un Opel Corsa; así como en el municipio pontevedrés de Moaña, donde se le vincula con el robo de un Volkswagen Golf.

Ya el 17 de febrero, se produciría el intento de sustracción de un Opel Corsa en el municipio de Poio, y que a la postre determinó el arresto de A.J.S., de 20 años.

Camión frigorífico

Sin embargo, la acción más espectacular que se le imputa a este vecino de O Vao tuvo lugar el 20 de febrero en la parroquia de Bértola, en el vecino ayuntamiento pontevedrés de Vilaboa.

A.J.S. supuestamente se encuentra detrás de la desaparición de algo así como 4.500 kilogramos de marisco y pulpo. A todas luces, trasladar este botín suponía todo un reto logístico que el joven de Poio superó, siempre según las informaciones aportadas por la Guardia Civil de Pontevedra, a base de ingenio y, claro está, sumar un nuevo delito a los que ya lleva sobre sus espaldas.

De este modo, antes de hacerse con el pulpo y el marisco, este vecino de O Vao presumiblemente se acercó hasta una nave próxima a la que almacenaba la mercancía y, supuestamente, sustrajo un camión frigorífico con el que culminar el transporte.

Tras prestar declaración en el juzgado de guardia, la juez de Instrucción número tres de Pontevedra decretó el ingreso en prisión del sospechoso. Fuentes consultadas precisaron que, probablemente, en breve este juzgado se inhibirá en favor de alguno de los otros dos existentes en la capital provincial, ya que el número tres tiene competencia exclusiva sobre los casos de malos tratos.