La portavoz de la coordinadora vecinal de Portas en defensa del tren, Lucía Latorre, relató ayer un «pequeño incidente» ocurrido cuando recogía firmas entre los viajeros de un tren que sobre las dos de la tarde se dirigía a Vigo. Según su versión, aprovechando que los vagones iban llenos de estudiantes decidió recabar apoyos, pero un revisor le dijo que no podía recoger firmas y que si no deponía su actitud tendría que echarla del tren.
«Vi que hablaba con alguien, pero yo decidí seguir porque los estudiantes estaban encantados y querían seguir firmando», comentó Lucía Latorre, quien señaló que finalmente el revisor volvió y me dejó seguir. «Supongo que se lo pensaron mejor y que decidieron dejarlo así para no darle más publicidad», remachó.
Un portavoz de Renfe indicó que el interventor comunicó el tema a jefatura porque es su obligación, ya que algún viajero podría sentirse molesto, algo que no pasó.