Hasta el 85 % del tubérculo de «calidade» se radica en A Limia
22 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Un ligero incremento que supera el 5 % con respecto a la anterior campaña marca el inicio de la cosecha 2019-2020 de la patata gallega con sello IXP. El Consello Regulador con sede en Xinzo verificó tras cerrar el plazo de presentación de solicitudes de siembra que 64 de los 79 productores inscritos en el órgano regulador del mejor tubérculo gallego sementaron en los pasados meses. Durante este tiempo el número de productores amparados se incrementó en 5, desde los 74. Se mantuvieron los 10 almacenistas que pueden comercializar este tipo de tubérculo de la variedad Kennebec.
En total se han sementado en 300 hectáreas, por las 280 del último año. Como viene sucediendo desde hace tres décadas, cuando se puso en marcha el Consello Regulador, la comarca de A Limia acapara la mayor parte de la futura producción de tubérculo, en este caso un 85%. La llanura antelana acoge a los 52 labradores que echaron siembra Kennebec ?la única amparada por el Consello- en sus fincas. Once lo hicieron en Bergantiños y 1 en A Terra Chá.
Se trata de un crecimiento sostenido en la cantidad de superficie sembrada con respecto a las anteriores campañas. «Aún es temprano para saber cómo evolucionará la cosecha y cuales serán los rendimientos», apuntaron fuentes del Consello Regulador.
Durante la campaña pasada la comercialización de la mejor patata gallega cayó de 6 a 4,8 millones de kilos tras un año de dificultades por la recogida tardía de la cosecha por los vaivenes de la climatología. En aquella ocasión, lo que sucedió es que la recolección del tubérculo fue muy tardía, al sembrarse meses después de lo habitual por los anegamientos en fincas durante la primavera. El Consello organizará mañana una jornada de promoción de la patata en un hotel de Xinzo, dentro de iniciativas similares que se llevan a cabo periódicamente en toda Galicia
Durante los próximos días comenzará, de forma aún muy incipiente, la recolección de una pequeña parte de la cosecha de patata en A Limia en algunas fincas de Trasmiras y Xinzo. Las labores no se intensificarán hasta la primera quincena de septiembre y no culminarán hasta avanzado octubre.
Las perspectivas en cuanto a calidad y cantidad son positivas. Las primeras evaluaciones, aún muy aventuradas, apuntan a que podrían superarse los 90 millones de kilos de la pasada campaña, marcada por esa minoración en el rendimiento de las parcelas por lo tardío de la recogida. En un año normal, la comarca antelana llega a los 120 millones de kilos. Se trata de una cantidad muy superior a los cerca de 9 o 10 millones de kilos amparados por el Consello Regulador, que exige unas características, dimensiones y cualidades que no alcanza la mayoría del tubérculo.
Además de la Kennebec, A Limia acoge otras variedades muy apreciadas como la agria ?muy demandada para frituras- o la Desiré.
El otro aspecto positivo en este prólogo de las labores de recolección del tubérculo antelano son los buenos augurios en cuanto a tasación del producto por los altos precios medios en el mercado nacional. Esta semana la tasación media en origen de la patata a nivel estatal supera los 30 céntimos, cuando hace un par de años apenas alcanzaba los 14.
En las últimas semanas, ese precio ha disminuido ya que la patata temprana de Castilla-León, que se recoge en junio y julio, llegó a superar hace algo más de un mes los 40 céntimos.