La Xunta invertirá 3,3 millones en la ampliación del parque
29 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El demorado proyecto de ampliación del parque empresarial de Xinzo se concreta. La conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, visitó el polígono industrial y anunció la dotación de casi 120.000 metros cuadrados de suelo más para emprendedores. La Xunta habilitará 23 nuevas parcelas para uso industrial y comercial. La inversión rondará los 3,3 millones de euros. La expropiación de terrenos, ya activada, supondrá un coste de 612.000 euros.
Ángeles Vázquez indicó que el objetivo de los trabajos de urbanización de los terrenos se realizará el próximo año. Los nuevas parcelas serán comercializadas, «a finais do 2020 ou a principios do 2021», según Vázquez, a un precio que aún está por determinar.
La responsable de Medio Ambiente justificó esta actuación ante la ocupación total de las parcelas del polígono de Xinzo. Un total de 40 empresas se radican en este parque empresarial. El Concello llevaba años reclamando la ampliación del suelo industrial.
Empresas
Fuentes del grupo de gobierno de Xinzo indicaron que la inminencia de la ampliación habría despertado ya el interés de dos grandes sociedad que estarían interesadas en radicarse en la villa. Se trataría de la multinacional de la alimentación Lidl y de la franquicia de ropa deportiva Spinter.
La historia del polígono se remonta a 1992. En ese año se iniciaron los trámites para su puesta en funcionamiento por parte de Xestur. Fue inaugurado en 1999 durante la presidencia en la Xunta de Manuel Fraga. Se planeaba urbanizar un total aproximado de un millón de metros cuadrados. De momento, y tras cuatro fase ejecutadas, el parque presenta unas 79 parcelas que ocupan un espacio efectivo de 300.000 metros cuadrados. La dotación de este suelo se realizó en cuatro fases, por 134.000 metros, 58.000, 27.000 y 77.000.
Hace tres años se publicó el anuncio de subasta de una finca de 72.655 en este polígono, que fue vendida a un precio que superó los 750.000 euros. La parcela fue comprada por el empresario José Antonio Gamallo, dedicado al sector del cereal. La iniciativa proyectaba la construcción de una factoría de almidón para alimentación; un proyecto que está estancado. Las dudas sobre si los patateros de la comarca están dispuestos a ofrecer al emprendedor la cantidad de tubérculo necesario para el mantenimiento de la factoría parecen ser una de las cuestiones claves del parón en el que se encuentra esta iniciativa.