El centro de recogida de animales encalla por falta de terrenos

MIRIAM SALGADO / L.D. MONFORTE / LA VOZ

XINZO DE LIMIA

OSCAR CELA

La parcela que se ofreció a la Diputación en Monforte no reúne las condiciones

03 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Lorena González, presidenta de un colectivo animalista, exponía el pasado mes de febrero la necesidad de introducir mejoras en el sistema de recogida de animales de Monforte. El alcalde aseguró entonces que los problemas a los que hacía referencia la presidenta de esa nueva asociación podrían llegar a solucionarse en un corto período de tiempo. Solo había que localizar un terreno municipal que cumpliese con los requisitos exigidos para crear un centro de acogida de animales abandonados. La Diputación, sería la encargada de gestionar estas instalaciones. Casi medio año después, la realidad es que no se ha iniciado ninguna obra. Ni siquiera parece haberse encontrado parcela alguna que cumpla con las condiciones que se requieren.

Maribel García, portavoz de Esperta Monforte, tenía previsto plantear una pregunta relacionada con la situación de la cesión en el pleno celebrado el pasado lunes. Pero no llegó a hacerlo. «Abandoné el pleno y me levanté indignada ante la falta de respuestas de Tomé. No contesta a nada de lo que le pregunto, aunque las cuestiones estén registradas», explica la concejala.

La falta de avances en el proyecto que anunció el alcalde desatan las críticas de Lorena González, que puso sobre el tapete la necesidad de abrir el centro de acogida de animales: «Llevamos meses esperando, pero no se ha dado ni un paso. Lo que falta no es encontrar un terreno, lo que falta es la voluntad de encontrarlo. El Ayuntamiento de Monforte tiene un convenio con una empresa con sede en Xinzo de Limia por el que paga 7.000 euros y, sin embargo, la empresa adjudicataria hace lo que le da la gana. El otro día casi muere ahogado un perro en el canal y de no ser por un ciudadano que pasaba por allí, nadie lo habría salvado».

«Había una parcela, pero no cumplía todos los parámetros, y el Ayuntamiento no tiene otra. Estamos buscando alguna que podamos comprar», afirma el alcalde a modo de justificación.

Trabajando en ello

Por parte de la Diputación las explicaciones al retraso en la ejecución del proyecto son similares. La antigua responsable del área de Medio Ambiente del organismo provincial, Sonsoles López, asegura que «se está trabajando en ello, las conversaciones siguen vigentes, pero hace falta una parcela y el terreno en el que se estaba pensando no cumple las necesidades. El alcalde está buscando otro espacio». Sonsoles López subraya, por otro lado, que «es un tema que no está paralizado».

Mientras no se resuelve el asunto, la empresa O Cuco se hace cargo de la recogida de animales. Sus responsables explican que es la Policía Local de Monforte la que se encarga de retener al animal hasta que ellos llegan. «Recogemos a un animal por semana, más o menos. Vamos siempre que nos dan el aviso aunque no nos pasan todos. De hecho, últimamente eso sucede a menudo», precisan.

Cifras dispares sobre el número de perros abandonados que se recogen

En lo referente a los animales abandonados, nadie parece ponerse de acuerdo. Ni siquiera existe coincidencia en las cifras. «En los cuatro primeros meses registrados hemos contabilizado 29 perros perdidos o abandonados y un total de 43 intervenciones por diferentes motivos y animales. Así que, al mes nos hicimos cargo aproximadamente de siete perros», señalan en el Policía Local. «Además de capturarlos, tenemos que comprobar si tienen chip y gestionar con la empresa su desplazamiento», indican las mismas fuentes.

La empresa O Cuco recibe 7.260 euros al año, dinero que a la encargada le parece «insuficiente» para hacerse cargo de los animales a los que rescatan. Lorena González no lo ve del mismo modo. «No vacunan, ni desparasitan, ni ponen chips a los animales. Se ocupan de los perros que les sirven para poner en venta. Cuando se pasan de una cantidad concreta, el Ayuntamiento tiene que pagarles trescientos euros más por cada perro, que es lo que costaría mantener a un animal si se vacunase y recibiese las atenciones adecuadas. Por eso al Ayuntamiento no le interesa recoger a demasiados perros», explica la presidenta del colectivo animalista.

Un comprador

Tomás es de los que se decidió por comprar uno de los perros que la empresa O Cuco había recogido y tenía en sus instalaciones. «A mí me hicieron una factura de cuarenta euros, pero el animal no venía desparasitado ni con chip. De hecho, aunque estuvo allí al menos dos semanas, tenía pulgas», afirma.