Una ferretería con 90 años de historia

Maite Rodríguez Vázquez
maite rodríguez OURENSE / LA VOZ

VILAR DE BARRIO

MIGUEL VILLAR

Cuatro generaciones siguieron al fundador Gregorio y tienen tiendas en Xinzo y Maceda

08 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Allá por 1927, con la perspectiva de nuevos negocios que abrió la llegada del ferrocarril a Vilar de Barrio, arribó a esta localidad Gregorio Fernández Llamas, un emprendedor castellano que echó raíces en la zona con su familia, tres hijos y una hija, y fundó la Ferretería Gregorio. La historia del nacimiento de esta ferretería, que noventa años después sigue existiendo con establecimientos en Xinzo de Limia y Maceda, la cuenta el nieto del fundador, Manuel Rodríguez Martínez, de 81 años. Su padre se casó con la hija de Gregorio y continuó el negocio en Vilar de Barrio.

Manuel, a su vez, es el padre de Manuel Antonio Rodríguez Fernández, que regenta la tienda de Xinzo, de Miguel Rodríguez Fernández, que se ocupa de la administración y de la tienda de Maceda junto con su hermano Bernardo, y abuelo de Diego Rodríguez, quinta generación ya de esta familia que se dedica a la ferretería.

Todos se fueron metiendo desde pequeños. «A ferretería era parte da casa, o negocio estaba debaixo da vivenda e a calquera hora tocaban o timbre. Sabías o prezo e as cousas», recuerda Manuel sobre sus inicios. A lo largo del tiempo, el negocio ha cambiado mucho. Ahora se acaban de enrolar en la cadena Optimus, que ha abierto su primer establecimiento en Ourense precisamente con la Ferretería Gregorio de Xinzo. «Agora hai un abanico de produtos multiplicado, unha competencia máis agresiva e o cliente tamén cambiou, antes era fiel, coñecíate de sempre. Hai que adaptarse ás novas tecnoloxías e a informática, pero iso para os novos eu xa non a collo», analiza Manuel. Y para los no tan nuevos, también; porque el veterano Manuel, ya jubilado, ayuda ahora a llevar la página de Facebook de la empresa. Aprovechó la jubilación para aprender en este campo. «Doy clases de Informática en el hogar del pensionista», revela Manuel padre. Con la cadena Optimus esperan desarrollar el mercado de Internet y poder competir en grandes plataformas, indica su hijo. Pero, a la vez, el cliente local necesita «servizo, información e confianza. Confía no que fas ti», opina Miguel.

«El negocio de la ferretería lo dejé porque ellos lo hacen bien. Me hace ilusión que los hijos continuasen», añade el padre. De su época al frente, menciona que «hubo que luchar mucho. Nos levantábamos a las cinco de la mañana y nos acostábamos a las doce. Había que ir a comprar a los almacenes o buscar la mercancía a Ourense». Por eso, se empeñó en que hubiese aquí una cooperativa de compras como la que había en Asturias. «Junté 18 socios y se montó un almacén», explica. Fue el germen de la actual cadena Optimus, que en el 2016 juntó las tiendas de distintas cooperativas, entre ellas la asturiana Cofedas para llevar a cabo nuevos proyectos.

La Ferretería Gregorio tiene actualmente ocho trabajadores, incluidos los tres hermanos y el sobrino. Los empleados son de casa, consideran ambos. Miguel, que se había ido a estudiar a la Universidad -se la pagaron sus hermanos, aclara- volvió, aunque solo le faltaba una asignatura, para ayudar en la empresa cuando falleció un trabajador que era como de la familia.