Vilamartín pone en marcha un banco de viviendas

La Voz

VILAMARTÍN DE VALDEORRAS

El gobierno local consultará a los vecinos sobre el destino de la vieja casa consistorial

04 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El Concello de Vilamartín acaba de poner en marcha una iniciativa para solventar problemas que comparte con muchos pequeños municipios de la provincia ourensana: la despoblación en sus núcleos y la proliferación de viviendas abandonadas. Esos inmuebles sin habitantes no solo acaban arruinándose con el paso del tiempo y convirtiéndose en un problema de seguridad, también suponen una barrera estética que aporta un aspecto triste y desolado a los núcleos que desanima a potenciales aspirantes a asentarse en ellos.

El gobierno local ha decidido facilitar el contacto entre los propietarios de esas viviendas sin uso y las personas que puedan estar interesadas en alquilarlas o comprarlas, sea para vivir cotidianamente en ellas o para pasar las vacaciones. El regidor, Enrique Álvarez apunta que el concello no media ni pone limitaciones al acuerdo entre las dos partes. «Nós non entramos neso. Só tentamos facilitar ese contacto entre os donos das vivendas e xente que pode interesarlle vivir aquí. Hai propietarios que están fóra e nin veñen en vacacións, ou utilizan outros inmobles, seus ou de familiares para estar neses días, e van deixando que se perdan», explica el alcalde. Aunque la experiencia lleva tan solo una semana en marcha, ya se ha producido un primer contacto entre un propietario y un aspirante a vivir en el municipio vilamartinés, aunque el regidor desconoce si han llegado a acuerdo. 

No es la única cuestión urbanística que tiene entre manos el gobierno local. Otro asunto sobre la mesa es qué hacer con el anterior edificio municipal que fue sustituido por la actual consistorial en el año 2002.

«Persoalmente penso que o edificio é unha mole horrorosa e esteticamente non aporta nada a praza, máis ben ó contrario: sería para demolelo e ampliar ese espazo público», opina el regidor. Sin embargo la piqueta no será, al menos de momento, el destino de este edificio ubicado en la plaza José Luis Núñez. «Ahí invertéronse moitos cartos públicos e non están as cousas como para desperdiciar; por iso queremos que a xente opine e que sexan os veciños quen decidan que uso se lle pode dar», relata el alcalde socialista. 

Para definir ese destino futuro de la vieja consistorial se abrirá un plazo en el que los vecinos podrán aportar sus ideas para ocupar y dar contenido a la instalación. Una vez recopiladas todas esas aportaciones, se elaborará una lista de propuestas que  volverá a someterse a la opinión pública. «Penso que neste aspecto non debemos decidir os grupos políticos; deben ser os veciños os que digan a sua opinión e faranse aquelas cousas que teñan os apoios máis maioritarios», resume